La destrucción de empleo no cesa y la provincia lo sufre más

Octubre ha sido el peor mes para el empleo en la provincia de Jaén, en comparación con el resto de la región. Ya son más de 60.000 los jiennenses que buscan un trabajo, una barrera que nunca antes se había superado, con los 2.754 que se han incorporado a lo largo de los anteriores 30 días a las listas de parados.

    04 nov 2011 / 10:24 H.

    No ha cogido por sorpresa, porque se trata de un periodo de tiempo en el que ya es habitual que el paro repunte hacia arriba, pero también es cierto que ha sido una subida mucho más sangrante de lo ya habitual. En 2010 fueron 1.711 personas y en 2009, 1.948, pero hay que tener presente que en 2008 eran 40.000 los parados, con lo que el incremento en estos últimos años ha sido absolutamente brutal. Los sindicatos hablan en términos catastrofistas, con advertencias como que se trata de una “nueva tendencia de destrucción masiva”, de manera que se avala su convencimiento de que la reforma laboral ha sido un rotundo fracaso a la hora de crear empleo y fomentar la estabilidad. Por el contrario, se favorece el despido y la temporalidad.
    Analistas de mercados aseguran que la actual crisis es más virulenta que la sufrida a principios de los años 90 y que se acerca a la de finales de los 70, con quince trimestres con tasas de crecimiento de empleo negativo. La tendencia es descendente y el horizonte a corto o medio plazo no se parece más esperanzador. Al menos, no hay datos que hagan pensar que se ha tocado fondo, circunstancia primordial para poder comenzar la ansiada remontada. En un marco en el que urge dar un golpe de timón para reconducir la grave coyuntura, son precisas medidas efectivas que reactiven de inmediato la creación de empleo, con los pies en el suelo. El problema de fondo es que el tiempo se agota y no se puede permitir que la desesperación cunda entre un sector tan amplio de la población. Lo importante es no olvidar jamás que detrás de cada cifra hay una historia personal dramática y única.