"Esta es una historia plagada de errores y falta de control"

Javier Limón, el marido de Teresa Romero, la primera infectada de ébola fuera de África, ha asegurado que su historia está “plagada de errores, desaciertos y falta de control político” y ha aseverado que no acepta las disculpas del consejero de Sanidad, Javier Rodríguez, por “matar” a su perro Excalibur y “casi” a su mujer.

28 oct 2014 / 11:29 H.

 

Acompañado por su abogado, José María Garzón, Limón dio una multitudinaria rueda de prensa pocas horas después de abandonar el Hospital Carlos III de Madrid. Su salida se produjo a primera hora de la mañana después de permanecer ingresado durante el periodo de cuarentena establecido por los protocolos de seguridad. Hoy se procederá a la desinfección de su casa para que pueda volver. “Ahora es el momento de exigir responsabilidades y de limpiar la imagen de todos. Teresa nunca ha sido culpable”, aseveró ante una sala repleta de periodistas, donde adelantó que sus abogados ahora estudiarán las acciones legales para emprender contra el consejero, para quien pidió su dimisión, y para reclamar en los tribunales por el sacrificio del perro.

Además, el abogado José María Garzón señaló que habrá que valorar si los incumplimientos de los protocolos pudieron poner en peligro la vida de Teresa, que aún permanece ingresada en el hospital, pero sin carga viral. Después de comenzar pidiendo que se tenga en cuenta que no está acostumbrando a esta situación tan mediática, Javier Limón ha querido dar las gracias por la atención que han tenido los medios, ya que sin ellos “este asunto tan mal tratado por los políticos” habría pasado desapercibido.

“Quiero dar las gracias a todas las personas que nos han dado su apoyo. Al personal sanitario, a los héroes desconocidos. Gracias a ellos por su profesionalidad y por poner en riesgo sus vidas. Creo que es justo decir que la Sanidad está hecha por personas. La Sanidad española es una de las mejores”, dijo. Asimismo, destacó que el caso de su mujer es “único en el mundo” y ahora se podrá escribir su historia, “una historia plagada de errores, desaciertos y falta de control político”. “Esta historia tiene un protagonista que es el ébola. Ha matado a miles de personas y solo nos ha preocupado cuando ha llegado a Europa. Espero que esto sirva para estudiar la enfermedad y se encuentre una vacuna”, señaló. Después de agradecer la labor de la que ha sido la portavoz de la familia, el marido de Teresa destacó que ahora ha llegado “el momento de exigir responsabilidades y de limpiar la imagen de todos”.

Así, subrayó que su mujer “nunca ha sido culpable”, en alusión a que pudo tocarse la cara con uno de los guantes, e insistió en que solo se le puede achacar su amor “a la profesión y entrega a los demás”. “Se entregó de forma voluntaria y nadie comprobó qué salió mal y eso casi le lleva a la muerte. Y hablo del consejero Javier Rodríguez, que ha puesto en su boca cosas que ella nunca dijo”.