Entre las raíces del folk cajún
Es un disco que “cuenta un montón de historias de pérdida como elemento central” y lo hace bajo el curioso título de La gran hamburguesa cajuna (Canciones para animales perdidos). Es la propuesta que acaba de lanzar Isaac Aguilera con Pianobomba, el tercer disco de este proyecto. Y esa dualidad entre la tristeza de las canciones y el humor en su título, dice el músico, tiene mucho que ver con él mismo.

“Este disco salió muy solemne con las canciones de amor y desamor, con el sentimiento de pérdida que pulula por todo el trabajo, y yo, precisamente, no me puedo definir como un tío triste, soy dicharachero y jovial”, reflexiona. “Mientras que haces el disco no te das cuenta, lo vas ordenando hasta que coge forma, pero cuando lo vi, dije, esto soy yo, es una parte de mí también, pero tenía que dejar mi sentido del humor por algún lado. Y tomé prestada esta frase de Pulp Fiction, de Tarantino”, explica. Pero lo de cajún va mucho más allá de la cinéfila frase: “Está conectado con el sonido del disco, ya que no es country al uso, se basa en la música rural de Nueva Orleans. Ese blues venía de los cajunes, francofonos llegados desde Canadá. Y este me inspiró para crear un entorno muy agradable para las letras”.
El sonido es, de esta forma, un intento de arqueología musical a través de las raíces del folk cajún, con el acordeón, el violín y los coros como elementos centrales de las canciones.
Otra de las características de los nuevos temas grabados por Pianomboma es que son muy directos, muy reales y naturales. “Sentíamos la necesidad de plasmar en estudio nuestra forma de abordar las canciones tal cual las tocamos sin ningún tipo de amplificación”, destaca. “Si el primer disco era una apología de la sofistificación y el trabajo de estudio, un Frankestein, aquí tratamos de que fuera lo más natural posible, acercarse a lo más real”, añade. Aún así hay pasajes eléctricos que conectan con los discos anteriores y algunas pinceladas de electrónica, elemento del que jamás prescindirán.
El disco lo presentaron en directo por primera vez en Granada, en junio, y quedaron muy satisfechos. Cuando pase el verano, la banda continuará trabajando para los directos y presentarlo con más conciertos. “Ahora tenemos un repertorio que creemos que llega a la gente, tras un largo camino”, concluye.