El ministro de Justicia plantea más jueces en los tribunales “atascados”
El ministro de Justicia, Rafael Catalá Polo, pronunció la última conferencia del curso de la Escuela Práctica Jurídica del Colegio de Abogados de Jaén. Además, en el sentido más amplio de la palabra “última”, ya que no habrá ningún ponente más durante este año ni tampoco celebrarán otra edición de esta Escuela, ya que, después de 26 años, se cierra para siempre para adaptarse a la nueva normativa, lo que conlleva un paso hacia la especialización.

En la sede del colegio de los letrados, Rafael Catalá demostró conocer el funcionamiento de la Justicia en Jaén y sus necesidades. Por eso, nada más bajarse del coche, compareció para asegurar que está satisfecho con la evolución de los tribunales en la capital y en la provincia. Dijo que es cercana y ágil, pese a que cuenta con un importante volumen de asuntos. Recordó que se tiene que adaptar a algunas reformas que ha realizado el Gobierno, como la implantación de los sistemas de nuevas tecnologías —obligatorios desde el 1 de enero de 2016—, aunque esto será una cuestión que afecta a toda España. No obstante, Rafael Catalá Polo sí que resaltó que existen juzgados, como los de lo Social y el Mercantil que tienen un mayor “atasco” debido al enorme volumen de casos derivados del auge de la litigiosidad. No hay que olvidar que ambos tratan asuntos relativos a empresas y laborales, que denotan un aumento de la conflictividad derivado de la mala situación económica.
El ministro de Justicia afirma que sabe de la situación que existe en los juzgados de lo Social y en el Mercantil, por lo que plantea dotarlos de jueces de refuerzo o, incluso, abrir nuevos órganos. Sin embargo, Rafael Catalá añade que se trata de una cuestión que se tiene que realizar en colaboración con la Junta de Andalucía y con el Consejo General del Poder Judicial y que se ha de plantear en la Conferencia Sectorial de Justicia. De ahí que el Gobierno de España deja claro que conoce la necesidad, aunque insiste en que se ha de plantear en estos foros. Por otro lado, Rafael Catalá explicó que la reforma del Código Penal servirá para proteger a personas y colectivos que habían manifestado una sensación de más vulnerabilidad. Resalta que protege a los agricultores frente a los robos que sufren. También declara que pretende reducir la carga de asuntos pequeños para que los magistrados y los fiscales puedan centrar sus esfuerzos en otros casos con más volumen de trabajo y de complejidad.
Rafael Catalá cierra la Escuela de Práctica con su modelo de Justicia para los jóvenes
Rafael Catalá cerró la Escuela de Práctica Jurídica del Colegio de Abogados de Jaén con la conferencia “Una Justicia para los jóvenes de hoy”. Justificó su presencia por la amistad que le une al magistrado de la Audiencia Provincial, Pío Aguirre. El ministro definió este ciclo como la transición entre el proceso formativo y el ejercicio de la profesión. También elogió a los colegios, de los que dijo que realizan una misión necesaria y se comprometió a revisar y evaluar el acceso a la profesión para la generación “mejor formada” de la historia de España. El ministro de Justicia deja claro que el país tiene un sistema de calidad en un momento complicado por las dificultades económicas, los problemas sociales y los desequilibrios en las cuentas. No obstante, Rafael Catalá insistió en el discurso de la recuperación e, incluso, defendió las últimas cifras de creación de empleo.
El ministro aseguró que la Justicia tiene que adaptarse a una nueva realidad en el que las nuevas tecnologías tienen que entrar en los tribunales, que han de ser capaces de coordinarse a pesar de que están acostumbrados a otros sistemas. No obstante, dejó claro que no es algo novedoso en la Administración, por lo que pidió a los letrados, fiscales, magistrados, secretarios judiciales y funcionarios que asuman el reto. Rafael Catalá aludió a la reforma del proceso penal. Dijo que hay procedimientos que se resuelven en poco tiempo, pero que otros se complican. Sin embargo, aseveró que a los ciudadanos hay que darles un tiempo de resolución para que la Justicia sea rápida y cumpla su misión. Además, manifestó que esto no conlleva un proceso de impunidad porque se ha de apelar a la sensatez y solicitar prórrogas cuando las circunstancias lo requieran.
Por otro lado, el decano del Colegio de Abogados de Jaén, Vicente Oya, dijo que es todo un honor que el ministro de Justicia pronunciara la última conferencia de la escuela. También dio las gracias a Pío Aguirre por el apoyo en la organización del acto. El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, también acudió a la clausura. Defendió el papel clave de la formación porque forma parte de la independencia del propio sistema y explicó que son conscientes de que la Justicia actual necesita una modernización.
Por último, el director de la Escuela de Práctica Jurídica, Juan Antonio Gutiérrez Carazo, explicó que ha formado a más de 900 letrados y que supone un referente en prácticas. Defendió su supervivencia y recalcó que se ha reinventado para adaptarse a la normativa y convertirse en un centro especializado. De hecho, el próximo curso formará en derecho agrícola y bancario, entre otras cuestiones. El acto terminó con la entrega de los diplomas a los alumnos que han terminado el curso y que se disponen a ejercer la profesión.