El Giribaile enseña de nuevo el Puente Ariza

La sequía y la falta de lluvias durante la época estival permiten admirar, de nuevo, la figura de la única pasarela de piedra que se conserva del maestro Vandelvira. El Puente Ariza situado a unos 17 kilómetros de Úbeda, en dirección norte, al que se llega por la carretera que conduce a La Carolina, se encuentra  casi todo el año, oculto bajo las aguas del pantano del Giribaile. Una impresionante obra arquitectónica, que solo puede verse en todo su esplendor cuando el descenso de las reservas hídricas lo permite. El puente cuenta con una longitud aproximada de 100 metros y 17 metros de altura en su punto más elevado. Se compone de 5 arcos de medio punto, de los que el vano central es el que presenta una mayor luz, con 32,7 metros. Está construido en piedra arenisca, lo que, unido a su perfil y configuración, le dan una singular belleza.

22 ago 2015 / 08:26 H.


 El problema comenzó con la ampliación de las obras del pantano, en la década de los 90. Debido al tipo de piedra con que fue elaborado, los daños que sufre son mucho mayores. Por ello, explicó uno de los miembros de la ejecutiva del colectivo Úbeda por la Cultura, Francisco Javier Ruiz Ramos, es más propenso a la humedad. A la larga, de hecho, esta circunstancia puede hacer posible la desaparición del puente. Ya son claros los signos de los daños que sufre la obra civil firmada por el genial arquitecto manchego.
Y es que, a pesar de ser un puente único en el mundo, las administraciones todavía no han sido capaces de aportar soluciones para conservarlo. “Las alternativas no son los colectivos ni la ciudadanía. No son ellos quienes tienen que decir que es lo que tiene que pasar”, asegura este miembro de Úbeda por la Cultura. Durante la época de los noventa del siglo pasado, se plantearon proyectos para su traslado a la ciudad de Úbeda, sin embargo nunca se ejecutaron. Tal y como explicó Ruiz Ramos, el valor que posee la obra arquitectónica es “incalculable”, por lo que colectivos y organizaciones culturales exigen su cambio de ubicación con la mayor urgencia posible. “Con esta obra se están incumpliendo diversas leyes de patrimonio, por lo que hay un incoherencia por parte de las administraciones”, afirmó. Concretamente, expuso, no se respeta la Ley de Patrimonio Histórico que indica que todo monumento que tenga interés y valor artístico, tiene que estar protegido. Las normas urbanísticas de Andalucía también garantizan la protección de este tipo de monumentos. “Para cualquier persona con interés en el arte e historiadores es una cuestión que nos preocupa mucho. No entendemos por qué existe esa dejadez y esa actitud de obviar un problema que sigue ahí” dice Ruiz Ramos.  Mientras llegan las exigidas soluciones, al menos, este año la sequía le ha permitido al puente emerger imponente sobre las aguas. No obstante, la época de lluvias volverá a ocultar en el pantano al último puente de Andrés de Vandelvira, catalogado como un trabajo único.