Dcoop repasa cómo invertir los millones de Hojiblanca
Dcoop —antigua Hojiblanca— quería seguir dentro de Deoleo —el actual nombre del Grupo SOS—. Se ha ido con “mal sabor de boca” y con cierta decepción. De hecho, su director general, Antonio Luque, decía esta primavera —en una entrevista en Diario JAÉN— que no entendía por qué las cajas de ahorros preferían vender su participación accionarial a un fondo británico —como CVC— antes que a una compañía con un tremendo potencial agroalimentario en Andalucía y, en definitiva, en el sur de España Solo en Jaén cuenta con 20 cooperativas, que son el sustento de miles de familias olivareras.
Dcoop —antigua Hojiblanca— quería seguir dentro de Deoleo —el actual nombre del Grupo SOS—. Se ha ido con “mal sabor de boca” y con cierta decepción. De hecho, su director general, Antonio Luque, decía esta primavera —en una entrevista en Diario JAÉN— que no entendía por qué las cajas de ahorros preferían vender su participación accionarial a un fondo británico —como CVC— antes que a una compañía con un tremendo potencial agroalimentario en Andalucía y, en definitiva, en el sur de España Solo en Jaén cuenta con 20 cooperativas, que son el sustento de miles de familias olivareras.

Sin embargo, esa sensación agridulce no es incompatible con el bolsillo. Los números de la operación llevan a pensar que a Dcoop le ha salido la operación redonda. Entrar en Deoleo le costó su marca estrella, como era Hojiblanca, que ahora es propiedad de Deoleo, al igual que Carbonell, Koipe, Bertolli y Caparelli —todas son líderes o tienen un tremendo peso en el mercado—. Y también tuvo que entregar su envasadora de Antequera. Marca y fábrica —el pago fue en especie— por el 9,68% de la compañía, que ahora se cifra en alrededor de 41 millones de euros, que son los que CVC tendrá que abonar. Si se hacen números, la cooperativa recibirá 10 veces más de lo que le costó.
En cambio, ahora existe un gran dilema: ¿Qué se hace con el dinero recibido? Dcoop cuenta con una línea de envasado de marcas de distribución —para supermercados— y un importante negocio de graneles. Ha sumado una línea de vino y crece con pujanza en el segmento de la aceituna de mesa, sobre todo en el extranjero. De hecho, lleva el aceite de oliva y la aceituna de la mano. En cambio, parece que los pasos futuros se encaminarán a una estrategia marquista potente con la que llegar a los mercados.
Hojiblanca ya no es suya y Cordoliva, Dcoop, Tierras Altas y Unioliva no están tan consolidadas en el mercado. Por eso, desde la compañía se señala que se preguntará a los socios qué hacer con los 41 millones recibidos, que serán claves para la estrategia de la compañía para los próximos años. No obstante, Dcoop deja claro que no parte de cero con 41 millones en el bolsillo, sino que lo hace con una compañía potente que maneja 300 millones de kilos al año y que tiene segmento de granel, alianzas para marcas propias, línea de aceituna de mesa, producción y comercialización de vinos e, incluso, diversas actividades ganaderas. Sin embargo, todo esto no esconde la realidad de que Dcoop quiere fortalecer la compañía con el dinero que ha recibido y apostar, también, por marcas potentes para competir con el resto en el mercado. De hecho, según ha trascendido, algunas decisiones de CVC en Deoleo ya no gustan a la gran cooperativa, por lo que Dcoop se habría sentido incómoda dentro de un accionariado del que sería partícipe, aunque sin la mayoría suficiente para tomar decisiones.
La compañía —aquí tiene la división Agrupa Jaén— afirma que no renuncia a lograr un volumen de 750 millones para convertirse en una gran cooperativa europea y, así, beneficiarse de las ayudas de la UE y del propio Gobierno español. En cambio, en unas semanas habrá que ver cómo se invierte el dinero que ha llegado. Hay 20 cooperativas jiennenses con voz y voto.