Castrense misa en Baeza
José Rodríguez Cámara /Baeza
El arzobispo general castrense, Juan del Río Martín, bautizó ayer a dos nuevos cristianos, dos alumnos de la Academia de la Guardia Civil de Baeza. En la emotiva ceremonia, que congregó a medio millar largo de personas, se confirmaron 162 futuros miembros del Cuerpo.

El arzobispo general castrense, Juan del Río Martín, bautizó ayer a dos nuevos cristianos, dos alumnos de la Academia de la Guardia Civil de Baeza. En la emotiva ceremonia, que congregó a medio millar largo de personas, se confirmaron 162 futuros miembros del Cuerpo.
Noemi y Juan Carlos, dos jóvenes que estudian para ser guardias civiles, bautizados en el transcurso de una emotiva ceremonia, fueron ayer los protagonistas en la Academia de Baeza. En la misa, presidida por el arzobispo general castrense, Juan del Río Martín, también fueron confirmadas 162 personas, un grupo formado, sobre todo, por alumnos, pero en el que también había algunos agentes de otros Cuerpos y familiares de miembros de la Benemérita. Con unas seiscientas personas, con veinte años de media, atentas a su homilía, el obispo de los Ejércitos españoles se mostró muy cercano. “No creéis en un fantasma, sino en una persona”, dijo monseñor para referirse a Cristo. “Cabrearte con Dios, hasta eso es creer”, dejó claro Juan del Río Martín, que recordó a los futuros agentes que, en su trabajo, se mezclarán con “las aguas subterráneas de la sociedad”. “Tendréis que asistir a situaciones muy límite, la fe os robustece”, argumentó. Además, recordó que ni los que decidieron bautizarse ni los confirmandos daban ese paso obligados.
El pastor no eludió el escándalo sobre los casos de curas pederastas y dejó claro que, a su juicio: “Hoy hay muchos judas”. A pesar de la referencia al triste asunto, la misa fue distendida, con doble acompañamiento musical, por parte de la banda de la Academia y del coro de alumnos del centro, que tiene su propio grupo. Las salves dedicadas a la Virgen del Rocío, advocación onubense, provincia de la que es natural el arzobispo, sonaron en más de una ocasión. También el clásico “Triunfal” aunque, lo más original, fue la adaptación del tema del grupo de rock Metálica “Nothing else matters” (“Nada más importa”), interpretada durante las confirmaciones. El arzobispo se despidió agradeciendo su labor al capellán del centro, Víctor Hernández, y pidiendo al director de la Academia que, ayer, ampliara las horas de descanso de los alumnos.