Carina Luna y su habilidad para crear para sí y el mundo
Ilustraciones de la jiennense Carina Luna Cabañero pueden verse en infinidad de camisetas. La artista, afincada en Santander, se abre paso como diseñadora gráfica, actividad que compagina con la pintura y la enseñanza, y que ha visto satisfecho su afán por crear.
“Siempre he querido crear, pero literalmente, y la vida me dio esa oportunidad”, dice Carina Luna. Empezó a tejer su sueño en Jaén, hace más de cinco años, con un proyecto alentado por el Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial de la capital (CADE).
Ilustraciones de la jiennense Carina Luna Cabañero pueden verse en infinidad de camisetas. La artista, afincada en Santander, se abre paso como diseñadora gráfica, actividad que compagina con la pintura y la enseñanza, y que ha visto satisfecho su afán por crear.
“Siempre he querido crear, pero literalmente, y la vida me dio esa oportunidad”, dice Carina Luna. Empezó a tejer su sueño en Jaén, hace más de cinco años, con un proyecto alentado por el Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial de la capital (CADE).
Era profesora en institutos y escuelas de arte, pero cuando empezaron los recortes y su teléfono comenzó a sonar de manera cada vez más intermitente, supo buscar su oportunidad. Entonces concibió su propio nombre y nació Claudia Iza, su “alter ego”, la firma bajo la que se da a conocer al mundo. Su eslogan: “Claudia Iza crea para ti”.
Como Claudia Iza ha encontrado la felicidad a ratos largos. Asegura que se nota en sus creaciones, de colores definidos y vistosos, trazos sencillos y líneas claras. “Es una etapa mía de alegría, de sentirme a gusto con lo que hago”, expresa. Ella, que estudió Bellas Artes, se especializó en diseño gráfico. “Siempre se me dio bien pintar, así que quise aprender algo que no dominaba”, relata, y pone así de manifiesto que no le asustan los retos con sentido. Aceptó el que le planteó una amiga suya cuando le pidió unas ilustraciones para sus poemas. Fue entonces cuando retomó los programas de diseño. “Me di cuenta de que sus posibilidades eran inmediatas y muy accesibles”. Pero Iza también pinta. “La composición de mis creaciones es muy pictórica. Son obras plásticas. Una especie de puente entre la pintura y el diseño gráfico”, describe.
Ha creado para muchos eventos: artículos de cumpleaños, logotipos de empresa, “merchandising” o camisetas llevan su firma, pero no puede dedicarse solo a ello. También pinta en su estudio de Santander y da clases de dibujo y pintura. Hace dos meses, inauguró una exposición en una librería santanderina.
“Me encantaría que Claudia Iza saliera adelante sola, pero necesito a alguien que apueste por ella”, dice. Tiene muy claro cómo quiere que ocurra (además del plan de empresa del CADE, ha participado en programas de la Sociedad Emprendedora Cántabra y la Fundación Incyde), pero, aunque algunas de sus ilustraciones son bastante conocidas, necesita financiación. “Hoy en día, las empresas lo quieren todo hecho. Que además de diseñar, haga las camisetas, por ejemplo, pero eso requiere alguien que crea en Claudia Iza”, señala. Lo que no impide que siga marcándose objetivos, como la tienda “on-line” que espera poder crear.