CAF da empleo a doce empresas auxiliares

Manuela Rosa Jaenes/Jaén
Los tentáculos de la empresa Cons- trucciones y Auxiliar del Ferrocarril (CAF), con sede en el País Vasco, no sólo se extienden a Linares, sino que se expanden por toda la provincia. Ya hay doce firmas auxiliares que surten con sus productos a la compañía ferroviaria.

    28 ene 2010 / 11:11 H.

    Son de la tierra, en concreto, de Linares, La Carolina, Guarromán, Vilches y Jaén. Suman en sus plantillas 438 trabajadores, quienes consolidan su puesto cada día gracias al trabajo que les reclama CAF. Hay seis empresas que suministran piezas del tren (conjuntos metálicos y de soldadura, piezas de carrocería o revestimientos, entre otros) y que, en total, emplean a 197 personas. Se trata de Exni (Linares), Fumapa (La Carolina), Grupo Antolín (Linares), Linapin (Linares), GH-Fabricación (Guarromán) y Poliester Soto (Vilches). Además, otras dos, con sede en Linares, son proveedoras de utillaje. Se trata de Exni, que emplea a 60 personas, y Gemeca, a diez. Por último, cuatro surten a CAF diferentes servicios: GH SAT, de Jaén, y Elio Cofely, Faescom y UTI de Linares. Tienen trabajo para 171 jiennenses.
    En este sentido, es crucial para el futuro industrial y laboral de la provincia de Jaén que la adjudicación de los cinco trenes que compondrán el tranvía de la capital sea para CAF-Santana, una empresa que, además, tiene 120 trabajadores directos en su planta.

    La garantía de la cercanía
    Son dos las empresas que pujan por la construcción de los cinco coches o vagones que circularán por las calles de la capital a finales de año. Se trata de Alstom y CAF, como es sabido. La primera tiene su principal planta de producción en Barcelona y la segunda, además de en el País Vasco, en Linares. De esta forma, si la adjudicación del tranvía termina, definitivamente, en manos de CAF, los vagones tranviarios se construirán apenas a cuarenta kilómetros de la ciudad, lo que, en consecuencia, facilitará los trabajos de mantenimiento y, en su caso, de reparación en el presente y en el futuro. Es decir, la cercanía se convierte en una garantía más a favor de la compañía con sede en Linares.
    Sin embargo, por el momento se desconoce qué empresa resultará ganadora de un concurso que lleva meses de retraso. El plazo de tiempo se convierte en un problema, ya que el tranvía deberá entrar en funcionamiento en diciembre de este año, por lo que apenas quedan diez meses para la construcción de los vagones para ponerlos en prueba.