Barcos, pájaros y turistas

 

Justo a unos metros del hotel en el que me alojaba había una parada del trenecito turístico. Una suerte de carrusel de feria tuneado que recorría la ciudad costera, un pueblo sin excesivos encantos más allá del inmenso mar. Cada día, por la tarde y por la noche, se hacían largas colas para montar en él. No había un perfil claramente definido: desde niños ilusionados con tan “emocionante” travesía inversamente proporcional a la que lucen sus progenitores en el rostro, hasta grupos de extranjeros con pieles enrojecidas por el justiciero Lorenzo de la canícula con sandalias y calcetines, pasando por parejas de jubilados haciendo hora antes de que comience la kermés del hotel de todo incluido con pulsera en la muñeca. El caso es que el tren siempre iba lleno. Entonces pensé en Jaén…

Miles de visitantes recalan cada año en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. Es uno de nuestros destinos más veteranos desde que empezó a gestarse, a mediados del pasado siglo, aquello que dio en llamarse turismo. La Diputación y la Junta de Andalucía comenzaron, el jueves, a hacer realidad un proyecto que permitirá poner en valor el “mar” de este espacio privilegiado, el pantano del Tranco. Hacerlo navegable, con un embarcadero y un barco solar posibilitará diversificar la oferta complementaria con la que ya cuenta nuestro inigualable parque. Una buena idea que permite sacar más partido aún a un producto que de por sí es bueno, pero que podemos convertir en excelente. La capacidad para ser conscientes de nuestras potencialidades, acompañada de ideas imaginativas, nos colocará en la línea del éxito.

Otro ejemplo. Esta semana, la Diputación de Jaén –especialmente comprometida en esta provincia en materia turística- presentó una guía para dar a conocer nuestra riqueza ornitológica a los potenciales turistas que recorren el mundo en busca de lugares donde contemplar pájaros. Un dato: en Europa, la nada despreciable cifra de 10 millones de posibles turistas. Nosotros tenemos la materia prima: centenares de especies en múltiples lugares de nuestro territorio. Pero, claro, quien viene a ver estos ejemplares busca un lugar donde alojarse, aprovecha su visita para conocer la tierra en la que se encuentra, como en sus bares o restaurantes… Porque no solo de pájaros vive el hombre. En fin, que crea riqueza, el objetivo al fin y al cabo del turismo.

Y como este ejemplo muchas otras iniciativas, como OleotourJaén, la Ruta de los Castillos y las Batallas, el Renacimiento del Sur o el Viaje al Tiempo de los Íberos, que no son, ni más ni menos, que apuestas decididas por generar posibilidades en una tierra que aspira a diversificar su economía, que no es otra cosa que crear empleo para el que no lo tiene. Y de paro, desde luego, andamos sobrados. 

27 feb 2014 / 23:00 H.