Ayuntamiento y patrulla verde, ¿para qué?
Desde Jaén. Imagínense. Todas las mañanas cuando levanto la persiana de mi dormitorio, el mismo paisaje: La gasolinera Fantasma de Santa María del Valle. O el Peine del Viento, obra maestra de Chillida, pero a mil kilómetros de San Sebastián. Porque cualquiera diría que el Ayuntamiento de Jaén lo ve como un monumento, porque siguen pasando los años, y ahí sigue. Que no sé cuándo se van a dar cuenta de que vivimos más de 300 familias en el entorno de esa plaza, y estamos sufriendo a diario ratas (y por ratas me refiero tanto a los roedores como a los humanos que hacen sus necesidades allí, que también son otras ratas), a basura, coches mal estacionados, etcétera.
Y la imagen que se da. Que lo primero que ve uno cuando llega a la plaza es la estructura totalmente oxidada y derruida de la gasolinera, eso sí, con un ojo (lo de mirar), porque con el otro hay que estar pendiente de los socavones que hay en el suelo, porque un día de estos nos vamos a dejar los bajos en uno de ellos y van a tener que sacarnos con grúa. Y cuando arreglan la Avenida de Santa María del Valle, los operarios no entran allí a arreglar la calle porque siguen órdenes del Ayuntamiento. Y otra cosa es el tema de la patrulla verde. Que me expliquen a mí, ¿para qué sirve esta gente? Por lo pronto en esta plaza (recuerdo, la plaza del Zodiaco) hay desde hace más de dos años, dos coches abandonados (un Renault Megane azul oscuro) y un Renault Clio blanco, este último con los faros rotos, lo que supone un peligro para cualquiera. Pues bien, he llamado varias veces el año pasado, y en este también. El 90% de las veces no coge nadie el teléfono. Y el resto de veces (he conseguido hablar con ellos tres veces en un año) han tomado nota de las matrículas (aunque yo creo que ni eso) y me han despedido con un “ya se pasarán los compañeros”. Nunca los he visto por allí. Por allí sólo pasa la Policía Nacional. Para los Locales tampoco existe la susodicha plaza del Zodiaco. Para los que sí existe es para los que dejan allí los coches abandonados. Para esos sí. Es denigrante vivir en esa plaza. Simplemente por el hecho de que para el Ayuntamiento no existe la plaza del Zodiaco. Sigue sin existir. Y eso que ya escribí hace tres años del mismo tema. Y nada, que no quieren enterarse. Bueno, pues como esto es lo mejor que puedo hacer, denunciarlo, aquí estoy de nuevo. Para denunciar que vivo en un lugar con unas necesidades en forma de limpieza, obras, tráfico, etcétera muy grandes, y para las que, sin embargo, el Ayuntamiento de Jaén, y el personal que depende de él (llámese Policía Local y Personal de Servicios) o no existe, o no quieren que exista.
Javier Cárdenas