Aquello que nace del alma
Digo sin requiebros que aquello que nace del alma tiene que ser bueno, impepinablemente. Porque el alma anda por la vida sin esquinas, va de frente y con paracaídas roto; por lo tanto, la facilidad con la que puede ser engañada es su único y bendito defecto.

Alma que bebe del corazón y que da vida a quien la busca y siempre encuentra compañeros inseparables con los que caminar ligeros de equipaje. Sorprenderse es siempre sinónimo de juventud e inocencia y al alma apelamos continuamente quienes perseguimos el camino que nos lleve a una sorpresa tras otra en forma de conquista para esta Jaén nuestra. Claro, que esto de vivir tiene su miga y en la virtud de hacer y tejer nace siempre el defecto de deshacer y trampear o lo que es peor, no dejar hacer. Afortunadamente, el partido siempre lo gana quien crea y hace.
Qué bueno que haya gente que sea ejemplo de vida sin pretenderlo. Trabajan, construyen y tejen sociedad, sin mirar, sin esperar, sin soñar nada a cambio. O sí, un mañana mejor para Jaén; que si le va bien a Jaén les irá bien a sus hijos, a su familia, a sus amigos y a sus vecinos; a todos. El día que a Jaén le llegue el convencimiento de sus posibilidades se dispara en las estadísticas. Porque Jaén está llena de gente que merece la pena, esa es la certera conclusión que lleva todo aquello que nace del alma, que como no tiene esquinas, tampoco armario. Alma y armario, retranca y dobleces no casan; que no. Y nos irá bien, nos irá mejor a medida que la conquista ganada a la autoestima la traspasemos a orgullo expreso de lo nuestro. O sea, que desterrado el victimismo, ahora toca el turno de ganar la batalla a la melancolía. En esas estamos enfrascados en este preciso instante y así lo relatarán los libros de historia. Que Jaén deja atrás sus sambenitos y forja un mañana mejor a base de tesón y coraje. ¿O es que no hay que ponerle sangre y dientes a la vida para tirar hacia adelante en una tierra acostumbrada al olvido y que, además, ahora la crisis la deja desamparada con el precio del aceite? No se cansa uno de relatarlo, con el realismo propio de quien ve el árbol, pero también el bosque y la espesura del horizonte. A lo lejos, ni el paraíso ni el imaginario jardín del jijijajá, simplemente la certeza de que otra Jaén es posible si luchamos juntos por una sociedad más libre, por una tierra más justa, por una ciudadanía más igualitaria. A eso se le puede llamar optimismo, por qué no, pero también de eso viven y beben las personas, de pensar bien, de creer en valores. No lo duden un momento, interioricen en lo más adentro de su alma: A Jaén hay que mirarla siempre con perspectiva de esperanza, de lo contrario nunca avanzaríamos, eso es lo que hacen los Jiennenses del Año, que tanto bien han hecho y hacen por Jaén; son nuestro orgullo y nuestra bandera. Felicidades.
Muy personal
Geolit: Un barco de enganche para surcar mares de esperanza.
Radio Linares: La vida está, la gente va y viene y ella perdurando.
Jaén CB: Cantera, valores, ejemplo y futuro. ¿Quién da más?
Alcalá Editorial: Líder, letras, libros en jaenero, un lujo aquí al lado.
Rosa Vañó: Pasión que se hace oro, herencia que se forja futuro.
Ana Cruz: Un primor de mujer, qué mérito eso de dar y no pedir.
JAÉN SIEMPRE
No me cansaré de repetir que el futuro está ahí al lado
SIEMPRE JAÉN
Con tesón y coraje, el mañana para Jaén será distinto,el que nos merecemos