Animales y perros
Vivimos en una sociedad tan deshumanizada e hipócrita que solo con leer las noticias que se publican cada día puede uno comprobarlo a la perfección. Un día se puede leer que en Jaén hay medio centenar de personas que duermen a diario al raso, que no tienen un techo ni un hogar en el que cobijarse. Personas que respiran, sienten y padecen, no simples números de esos que salen en las estadísticas.
Pues bien. Al día siguiente ves en la televisión un reportaje de los pobres perros que abandonan todo el año, pero sobre todo en verano, porque son un estorbo para irse de vacaciones o cosas por el estilo. Nos rasgamos las vestiduras con los pobres animalitos, y no somos capaces de pensar en las personas, de carne y hueso como nosotros, que no tienen siquiera un colchón o unas paredes que los amparen. No quiero decir que me parezca bien que mueran perros, por supuesto que no. Pero hay prioridades y prioridades. Las personas deberían ser siempre lo primero. Y mientras haya una que duerma en la calle, hay que dedicar a eso los esfuerzos o los presupuestos que haya. No me gusta ver cómo sacrifican a los animales y me duele cuando veo algunos vagando sin rumbo por las carreteras o los polígonos industriales, pero es mucho más duro e inadmisible que una persona pase por esa situación y en nuestras narices. Es mi modesta opinión.