Andújar perdió su magia atlética
Gilberto Moreno /Jaén
El Memorial Francisco Ramón Higueras, una prueba atlética creada para rendir un homenaje a una promesa fallecida en un accidente de tráfico mientras cumplía el servicio militar, se dejó de organizar en 2007 de forma sorprendente. La reunión, con un presupuesto modesto para la calidad de los atletas participantes, fue un referente nacional e internacional.

El Memorial Francisco Ramón Higueras, una prueba atlética creada para rendir un homenaje a una promesa fallecida en un accidente de tráfico mientras cumplía el servicio militar, se dejó de organizar en 2007 de forma sorprendente. La reunión, con un presupuesto modesto para la calidad de los atletas participantes, fue un referente nacional e internacional.
Andújar y la provincia están huérfanos de una reunión que ya es historia viva del atletismo nacional e internacional. La crisis y el cambio de política deportiva en el Ayuntamiento originó que se suspendiera en 2007, aunque se tenía previsto organizar una competición para las promesas. En eso se quedó, en una simple promesa, porque no se disputó y ya va camino de los cinco años. Los nostálgicos recuerdan con cariño el Memorial Francisco Ramón Higueras. Tres hombres importantes en el deporte provincial impulsaron la prueba desde sus comienzos. Dinero había poco, pero ilusión mucha. José Gutiérrez Menor, Manuel Ortega Cáceres y Gaspar Molina Génave realizaron un trabajo perfecto y que sirvió como impulso para el futuro. Con un presupuesto modesto en comparación con otras competiciones, como el Memorial José María Cagigal de Madrid o el Núñez Blanca de Granada, la actividad iliturgitana fue rica en participación. El secreto era sencillo: humildad y cariño a los atletas, que dejaban el dinero en un segundo plano. Ellos querían correr en Andújar por el trato humano que recibían en la última prueba del calendario. También, en algunos casos, se permitieron alguna licencia de vivir la feria iliturgitana.
En 1988 se celebró la primera edición y desde ahí la reunión creció de forma imparable. Andújar era conocida en todo el mundo, al igual como Linares con el ajedrez. El Nuevo Estadio, con capacidad para 2.000 personas, fue testigo de noches de verano con un espectáculo deportivo maravilloso. La presencia de Fermín Cacho le dio más prestigio, sobre todo porque participó después de conseguir la medalla olímpica en Barcelona 92. Precisamente, en una de sus visitas conoció a Susana Barrios, con la que se casó en septiembre de 1997. El historial de las diecinueve ediciones también recoge anécdotas y situaciones que marcaron la carrera. En 1993 un corte de luz dejó sin suministro eléctrico a la pista de atletismo. Con imaginación y superación, la organización solventó el problema: las luces de los coches iluminaron el trazado en la prueba de 3000 metros. De ahí, el titular de Diario JAEN en esa edición: Andújar brilló sin luz. La progresión fue excelente y situó a la carrera en la cima atlética. Campeones de los Juegos Olímpicos, del mundo y europeos dejaron constancia de su calidad en el tartán iliturgitano, que, con el paso de las ediciones, se deterioró de tal forma hasta poner en peligro la integridad de los atletas. Incluso, un año ese magisterio lo pusieron en práctica en la calle, debido a las obras en el centro deportivo. Fue en 2003 y el Memorial Francisco Ramón Higueras no perdió interés. Todo lo contrario. Cosechó un nuevo éxito en el casco urbano. El prestigio también aumentó al superarse cuatro récords de España. Cacho batió la plusmarca nacional de los 1.000 metros; la estadounidense nacionalizada española Sandra Mayers, la de 600; el jiennense Juan de Dios Jurado Zafra, el de 600, y el sevillano Antonio Jiménez Pentinel, el de 2.000 obstáculos. Ana Fidelia Quirot hizo lo propio con el de Cuba. Unos mosaicos inmortalizan las gestas logradas por los atletas. Se encuentran en las paredes de acceso al Nuevo Estadio.
La cifra de estrellas es interminable, pero merece la pena recordar a los más conocidos y a los que dejaron su impronta en esas noches veraniegas de septiembre. Los cubanos Iván Pedroso y Javier Sotomayor levantaron a los aficionados de sus asientos, así como la élite nacional: Manuel Martínez, Dana Cervantes, Manuel Pancorbo, Juan José Rosario, Alberto García, Martín Fiz, Paquillo Fernández, Isaac Viciosa, Luis Miguel Martín Berlanas, Jesús España, Reyes Estévez, Nuria Fernández, Juan Carlos Higuero y Abel Antón. Y que decir de los portugueses Rui Silva, Antonio Leitao y Frank Obikelu. Esa es la categoría universal del Memorial Francisco Ramón Higueras, una prueba incomparable que se perdió en una noche de 2007.