Una Romería muy peculiar

Calurosa celebración en el Parrizoso a la Virgen de las Angustias

08 jul 2019 / 09:22 H.

Para llegar a la aldea del Parrizoso desde Valdepeñas de Jaén hay una carretera asfaltada pero deteriorada. Allí se celebra desde 1942 una romería muy peculiar a orillas del Quiebrajano, donde los vecinos de la aldea, hace más de cuarenta años, en un gesto de solidaridad, renunciaron a sus tierras para que se construyera el embalse que abastece a la capital y municipios de Jaén y Córdoba.

Cientos de personas que fueron vecinos del Parrizoso y ahora viven en otros lugares como Jaén capital o Valdepeñas, se dan cita cada año en este lugar para conmemorar lo que comenzaron sus mayores hace sesenta y siete años. Desde entonces, la Virgen de las Angustias es la protagonista, cada primer domingo del mes de julio, de una procesión a hombros de los fieles desde su ermita (que data de la fundación de Valdepeñas, en el año 1539). A continuación, tiene lugar una misa de campaña oficiada por el párroco de Valdepeñas, Ildefonso Rueda Jándula. Al finalizar la función religiosa, la imagen retorna a la ermita y comienza la fiesta entre familias que acuden provistos de las mejores viandas para pasar un día inolvidable en el lugar que les vio nacer a la mayoría y que fue morada de sus antepasados.