Un camino inolvidable

La Asociación Jacobea de Jaén parte en un intenso viaje a Santiago

30 jun 2019 / 12:42 H.

Llega el verano y es una de las fechas más señaladas en esta época para miles de peregrinos que parten para realizar el Camino de Santiago. Este es el caso de las 52 personas de la Asociación Jacobea de Jaén que viajan para participar en esta actividad, para algunos nueva y para otros que forma ya parte de sus rutas y citas ineludibles a lo largo del año.

Esta es una experiencia inolvidable que llevan tiempo preparando desde la asociación para que todo el mundo pudiese participar en el trayecto y en su viaje para hacer este intenso camino. Aunque son muchos los que por unas razones u otras no han podido hacerlo, este año son 52 los peregrinos de la entidad que no se han querido perder la oportunidad de participar en este acontecimiento y acercarse hasta Santiago de Compostela. Para la ocasión, han preparado muchas cosas, incluso una camiseta oficial de Camino Mozárabe de Jaén para dejar claro en todo el trayecto de dónde vienen, porque aunque suban al norte, no olvidan su lugar de origen, y menos en estos momentos.

Durante los próximos días toca realizar este camino y coger mucha fuerza y ganas para dedicarse a superar los pequeños obstáculos hasta llegar al lugar de meta, aunque es mucho el esfuerzo que los participantes ponen para conseguir llegar hasta el final del camino. Así, abandonan el calor del sur y de otros puntos del país para subir hasta el norte, en un peregrinaje que, aunque costoso en algunas ocasiones, resulta ser finalmente muy reconfortante para los que lo consiguen.

Un recorrido que va, prácticamente, de una punta a otra de España y en la que los participantes disfrutan con el propio camino y con las actividades que van haciendo durante estos días. Porque no solo supone una manera de hacer peregrinaje y realizar un viaje que cada año hacen muchísimas personas durante estas fechas, sino que son también unas jornadas de convivencia que sirven para que estos 52 jiennenses compartan, se conozcan más y convivan entre anécdotas mientras que caminan hasta Santiago de Compostela. Una vez lleguen al lugar de la meta, el resultado será, sin lugar a dudas, muy satisfactorio para sus participantes, pero mientras tanto, toca seguir el camino, ayudarse entre ellos y hacerlo con la mejor de las alegrías, algo que consiguen hacer de una manera muy fácil y disfrutando de la compañía de los unos y de los otros.