cien años llenos de cariño
Francisco Valenzuela cumple un siglo de vida y lo celebra en la capital


El tiempo pasa tan rápido y de manera tan intensa que 24 horas parecen pocas para celebrar 100 años de vida. Aún así, y pese al temporal que azotaba la capital, la familia del jiennense Francisco Valenzuela Serrano sabía que no todos los días se cumplía un centenario. Por esa razón, le prepararon una sorpresa para que fuera uno de sus mejores recuerdos.
El gambero fue el restaurante elegido para rendir homenaje a Valenzuela. Allí, cuatro generaciones se dieron cita, por lo que más de medio centenar de familiares pusieron, a su disposición, todo su cariño y atención. Así, celebraron un almuerzo y posaron ante un photocall que decía “100 años abuelo Paco”. Después recorrieron los pasillos de la memoria gracias a una exposición doble en la que, por un lado, se podía apreciar imágenes suyas de su vida y, por otro, instantáneas de los miembros de su familia.
Sus nietos y bisnietos aprovecharon la ocasión para regalarle sus mejores palabras. Así, le leyeron una carta en la que decía: “Nos sentimos muy contentos por poder celebrar contigo tu 100 cumpleaños. Resaltamos el amor que le tienes a tus hijas y a nuestra abuela, las idas y venidas cuando nos llevabas al colegio o al fútbol. Damos gracias a Dios por este día”
Valenzuela se emocionó y agradeció a todos su esfuerzo por que todo estuviera tan perfecto. Según él, este encuentro —que, a su parecer, estaba mejor planificado que una boda— fue una inyección de moral que lo ha mantenido muy animado.
Aunque ese mismo día no pudo pasar por la parroquia Santiago Apóstol, de la que es fiel, los sacerdotes se acercaron al día siguiente a su casa para felicitarle y llevarle un regalo. Además, el servicio de teleasistencia no se olvidó de este día tan especial y también le hizo llegar su felicitación. Y es que, en ocasiones, el mejor regalo es estar todos juntos, celebrar la vida con cariño, amor y, sobre todo, festejar que 100 años, en tan buena compañía, es un siglo lleno de buenos recuerdos.