La camarera de la virgen

11 jul 2019 / 08:00 H.

Viernes Santo en Jaén y por sus calles, en palio de cajón, va la Dolorosa de San Juan. Todos la miran, conmueve su rostro de dolor, y antecediendo a la Señora una comitiva, una presidencia de mujeres de mantilla, son sus Camareras que van rezando a la Madre que llora de pena, y en medio de ellas, tú, aquella señora de pelo blanco y avanzada edad, elegante y de porte envidiable para muchos que la admiran... Esa señora eres tú, Angelita.

Muchos jiennenses así te recordarán, por ser la Camarera de la Virgen de los Dolores de San Juan. Y es curioso, porque te hayan conocido en realidad, hayan oído hablar de ti o solamente te hayan visto ante Ella cada Viernes Santo, no estarán equivocados en su recuerdo, y es que es así, has sido, eres y serás la Camarera de Nuestra Señora de los Dolores de San Juan.

Larga vida en la que tus principios morales y rectitud te han acompañado siempre, sacando tu carácter a relucir para defender tus convicciones. Generosidad y sencillez han marcado tu vida. Has sido una persona seria pero acogedora, tierna pero luchadora, pues no hemos conocido una Camarera más entregada.

Pertenecías a varias cofradías pero solo la Dolorosa de San Juan cautivó tu alma para convertirte en su más fiel y amorosa hija. En 1964 llegas de mano de Don Juan Lozano a la Cofradía y en marzo de 1976 aceptas ser Camarera de Nuestra Señora de los Dolores. Cargo que el 28 de noviembre de 1998 se convertiría en el de Camarera Mayor, el cual has desempeñado con el respeto y la dignidad que exige ser Camarera de la Madre de Dios.

Tu trayectoria como persona y como nuestra Camarera Mayor ha sido ejemplar, tu amor y dedicación a la Dolorosa de San Juan es una guía para todas las Camareras de la Congregación y ejemplo para todos los cofrades de esta Cofradía y del mundo cofrade de nuestra ciudad. Por eso, aquel 24 de septiembre de 2017, tus hermanos cofrades aprobaron por unanimidad el concederte la Medalla de Oro de la Congregación del Santo Sepulcro, máxima distinción a un cofrade en su historia, y es que tú, Angelita, eres historia en nuestra Congregación.

Nos faltará vida para agradecerte todo lo que has hecho por nosotros, tu familia cofrade, que se sentirá huérfana y triste al no verte junto a la Señora de San Juan, pero estaremos felices pues ya estás frente a Ella, más cerca aún de lo que has estado en vida.

Será Viernes Santo en Jaén y por sus calles Nuestra Señora de los Dolores. Todos la miran, la miraremos, y después miraremos al cielo, porque allí, allí está nuestra querida Angelita con su Virgen de los Dolores de San Juan.