“Hola mi amor, otro año más sin ti y ya se van a cumplir once de soledad”

Me parece mentira que haya sido capaz de vivir todos estos años sin ti aunque siempre te tengo aquí conmigo, en mi pensamiento, en mi alma, pero no te puedo tocar, y cómo necesito tu abrazo, tu sonrisa, tus ojos, ese brillo tuyo, que cuando entrabas en una habitación toda mi vida se iluminaba. Cómo puede seguir doliendo de esta manera, sigo viviendo y teniendo buenos ratos con nuestras hijas, nuestros nietos, nuestro Noni, no me gusta la palabra yerno, ya es un hijo más, pero para todo te sigo necesitando y me gustaría que estuvieras disfrutando aquí de todo. No te puedes hacer una idea de lo que tus nietos hablan de ti. El otro día los dos empezaron a recordarte y a preguntarme tantas cosas... para las que yo no tengo respuesta ¿Por qué te fuiste? ¿Qué les digo yo, si yo todavía no he sido capaz de contestar? Enseguida se dieron cuenta de que aún duele. Hay momentos en que me gustaría arrancarme el corazón para que no me doliera tanto, pero la vida sigue y yo me siento cada día más sola, y eso que siempre están las nenas pendientes de mí, pero te echo de menos. Me costó tanto trabajo encontrarte y tardé tan poco en perderte... Sé que es egoísmo, pero no te imaginas cómo te echo de menos, es que eras tan importante para nuestras hijas, para todo el mundo y las personas que en algún momento te tuvieron en su vida... Sigues muy vivo en todo el mundo, tus compañeros, nuestros amigos y gente que no llegó a conocerte pero sabe de ti por todo lo que hablo, y todos te quieren y te recuerdan. ¡Cómo olvidar a alguien como tú! Una persona que siempre tenía una sonrisa, una palabra amable. ¿A quién no le hiciste un favor? Todavía hasta te recuerdan los que en su momento discreparon contigo, pero has sido una persona muy importante para todos.
Muchas veces me siento tremendamente egoísta y la verdad es que poco a poco me voy reconciliando con la vida, pienso que eras demasiado bueno para estar solo aquí. Pero claro, a mí me siguen haciendo falta tus manos, esos brazos que, por mucho frío que tuviera, eran capaces de hacerme sentir reconfortada. Bueno, es que donde estés seguro que estarás ayudando a alguien que te necesita, no más que yo, pero bueno. Otra cosa, ahora estarás más acompañado: ya están ahí contigo nuestro querido Manolillo, y nuestro vecino Paco, que desde que te fuiste no fue capaz de entrar en casa porque no podía contener las lágrimas. Ahora me toca hacerte un guiño de los nuestros y tú sabes por qué. He estado unos días muy triste, alrededor de la fecha de nuestro aniversario, mi amor, ya 37 años y me ayudó mucho algo que pasó, que me hizo darme cuenta de que sigues aquí conmigo, lo que pasó lo sabemos tu y yo. Bueno mi amor, aquí termina este recuerdo, aunque tu imagen no se borra.
Siempre estás en el corazón de los que te queremos, sigues muy vivo aquí.