Una oportunidad para brillar

Simón Cruz jugará el Abierto de Tokio de Parabádminton, en el que Gustavo López actuará como técnico

18 ago 2017 / 11:45 H.

Simón Cruz se ha convertido en el mejor jugador nacional de parabádminton, la versión paralímpica del bádminton que formará parte del programa de los Juegos en Tokio 2020 por vez primera en la historia. El iliturgitano pretende competir en esta citan histórica y emular a Juan Antonio Prieto Cárdenas, José Antonio González Beltrán. “Aouita”, y a Miguel Ángel Martínez Tajuelo. Antes de asegurar su presencia busca resultados positivos en los torneos a los que ha sido convocado. El reto principal de Cruz es el Mundial de Corea del Sur, que se disputará entre el 21 y el 25 de noviembre, y para ello se somete a una dura preparación antes de esta cita. El jugador ha sido convocado para concentrarse, entre el 1 y el 5 de septiembre en Shizuoka (Japón), para después participar en el abierto de este país, que se celebrará entre el 6 y el 10 del próximo mes en Tokio. Simón Cruz trabaja en las sesiones de entrenamiento con Gustavo López, su técnico y que, además, es uno de los responsables de la selección española, junto con Dina Abouzeid y Dolores Marco, respectivamente. “Partimos a Japón a finales de agosto y el objetivo es seguir con los entrenamientos para llegar en las mejores condiciones al torneo de Tokio, una competición que es puntuable para los Juegos Paralímpicos de 2020. Simón está ilusionado y deseamos ofrecer una buena imagen en una actividad en la que estará presente la élite mundial”, asegura el preparador, que también es responsable de la coordinación deportiva del Bad Flay y jugador de este conjunto.

Simón Cruz entiende que el Abierto de Tokio es una excelente piedra de toque con vistas al Mundial de Corea del Sur. “La élite del parabádminton estará en el torneo y espero completar una buena actuación en tierras japonesas”, declara el iliturgitano. En la concentración y en el torneo no estará solo, porque han sido también convocados el cordobés José Lama Seco, el vasco Javier Fernández de Luco, la toledana Esther Torres Muñoz y la valenciana Marcela Quinteros Covella. “Se ha formado un equipo interesante y tanto los jugadores como los técnicos formamos una gran familia que tiene como meta promocionar el parabádminton”, se alegra. Gustavo López asegura que los especialistas españoles cada vez logran mejores resultados. “Todos ellos, junto al conjunto técnico, se esfuerzan por progresar y son conscientes de que el parabádminton formará parte de los Juegos de Tokio de 2020. Es una oportunidad para poner en valor nuestro deporte”, reflexiona el seleccionador nacional y uno de los pioneros del bádminton en la ciudad.