Un desafío por la batalla contra la ELA
Jorge Abarca sube a La Pandera para dar a conocer la enfermedad

Cada vez son más los deportistas que muestran su lado solidario y crean un lazo de unión entre el deporte y una enfermedad. En este caso, se trata del granadino Jorge Abarca que ascendió en su bicicleta adaptada al Alto de La Pandera en su segunda subida a un puerto. El deportista, que padece Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), se ha propuesto el reto de ascender a los nueve puertos especiales más importantes de La Vuelta ciclista a España y algunas del Tour de Francia. El granadino quiso empezar primero por los alrededor de Granada y, por ello, el primero fue el de Calar Alto, en Almería. Posteriormente, le tocó el turno al Alto de la Pandera en Jaén. Quince kilómetros de trayecto en los que estuvo acompañado de sus amigos y familiares, que le muestran su apoyo incondicional.
Abarca explica que uno de los objetivos de estos retos es recaudar fondos para la investigación de esta enfermedad, algo que se puede hacer a través de su página web. “Yo fui siempre muy deportista, fui futbolista, corredor de montañas, jugador de pádel, entre otros. Estuve muy volcado con el deporte. Por eso, cuando fui diagnosticado, vi la carencia y la necesidad de dar visibilidad a esta enfermedad, que era muy poco conocida”, confiesa. Fue entonces cuando se propuso poner “cara” a este padecimiento a través del deporte. De esta forma, el granadino apoya un proyecto de investigación mundial que se llama “Proyect Mine” y hace campañas a través de su web. Así pues, en esta ocasión, Abarca recorrerá parte de la geografía española y francesa. Su próxima cita será en tierras asturianas, puesto que ascenderá al espectacular Angliru y al mítico Lagos de Covadonga. Posteriormente viajará a los Pirineos franceses, al Torumalet y al gran Aubisque. Después, llegará a Andorra, donde subirá hasta el recientemente descubierto coll de la Gallina para trasladarse hasta Barcelona, donde organizarán un ascenso a Montserrat antes de regresar a Granada. Ya de vuelta, le quedará la última prueba: una subida a Sierra Nevada. En total, casi un desnivel por encima de los 10.000 metros y unos 173 kilómetros de recorrido. Asimismo, sostiene que su objetivo es alcanzar los 10.000 euros, un euro por metro de subida realizado.