Mayca Jiménez: “Ni en mis mejores sueños imaginé vivir un Mundial de esta manera”

La periodista bailenense cuenta cómo han sido estos días cubriendo el recorrido de la selección española y el emocionante triunfo

21 ago 2023 / 16:59 H.
Ver comentarios

LA ENTREVISTA

Mayca Jiménez (Bailén, 5 de septiembre de 1994) vivió un día histórico para el fútbol español femenino. España se proclamó campeona del mundo, y ella estuvo allí para contarlo y vibrar en la celebración de las campeonas. Un sueño hecho realidad ya que desde bien pequeña creció entre los banquillos de los equipos amateurs que entrenaba su padre en su localidad natal. La periodista ha estado cubriendo el Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda 2023 para el medio digital Relevo, y ha permanecido 40 días siguiendo el día a día de la selección española. Mayca Jiménez, durante su largo viaje de regreso a España y todavía con resaca emocional, ha querido contar su experiencia para Diario JAÉN.

—¿Cómo ha vivido este Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda?

—Para mí ha sido increíble. Tanto a nivel laboral como personal. Vivir el Mundial ha sido una experiencia única que no olvidaré. Ni en mis mejores sueños imaginé vivir un Mundial de esta manera.

Ha trabajado en grandes acontecimientos para el fútbol femenino como las cuatro finales de Champions femenina que ha disputado el FC Barcelona en Budapest (2019), Gotemburgo (2021), Turín (2022) y Eindhoven (2023). ¿Pero qué ha supuesto este Mundial femenino? ¿Puede suponer un antes y un después en su trayectoria profesional?

—No sé si supondrá un antes y un después en mi carrera. Sin duda, me ha marcado y creo que salgo de él siendo mejor periodista. Al final, se presentan situaciones a las que nunca te has enfrentado y cada día afrontas problemas de logística y de organización, como la diferencia horaria o el hecho de pensar temas e ideas nuevas diariamente tanto para redes sociales como para la web, que te hacen aprender a gestionar mejor situaciones cómo esta.

—Ha estado en los dos Mundiales que se han disputado en estos últimos diez meses: Qatar 2022 y Australia y Nueva Zelanda 2023. Son dos países totalmente distintos en cuanto al trato hacia la mujer. ¿Cómo lo ha notado en primera persona?

Como dices, son países muy diferentes. A todos los niveles. Por suerte, yo no tuve ningún problema en Qatar por ser mujer. Aunque esto también se debe a que yo estaba bajo el amparo de la FIFA y el trato que recibía era muy privilegiado. Lo que sí que se palpaba dentro de esta falsa realidad era en la falta de libertad de expresión de la gente que vivía allí. Tenían miedo a hablar. Es una vergüenza que se disputara un Mundial allí. Esto no ocurre en Australia y Nueva Zelanda. Son dos países avanzados en derechos humanos y la vida allí es muy parecida a países europeos como España.

—En España el fútbol femenino está creciendo a pasos agigantados, ya se vio en los récords de asistencia vividos en el Camp Nou durante la Champions de 2022 o en el Wanda Metropolitano en 2019. ¿Qué puede decir al respecto?

—Es muy positivo todo lo que se está viviendo estos últimos años en el fútbol femenino. Sobre todo, a nivel de visibilidad. En estos casos, siempre digo lo mismo. Cuando yo era niña, no vi nunca un partido de fútbol femenino por televisión. Me gustaba el fútbol y quería jugar, pero no sabía que existía esa posibilidad para nosotras. Ahora, cualquier niña o adolescente enciende la televisión y ve a mujeres y hombres jugando al fútbol. Es la normalización de que puedes practicar este deporte sea cual sea tu género.

—Se habla mucho de la mayor presencia de mujeres en diferentes medios de comunicación a la hora de cubrir informaciones deportivas. ¿Cree que aún queda mucho camino por recorrer?

—Por supuesto. Aunque cada vez son menos, sigue habiendo quien mira a la mujer que trabaja en el periodismo deportivo con dudas. El día que ni siquiera exista esta pregunta en una entrevista será cuando de verdad habremos conseguido normalizar este tema.

—¿Este Mundial puede suponer el espaldarazo definitivo para el fútbol femenino en España?

—Puede y debe. La oportunidad es enorme y hay que aprovecharla para que la Liga femenina siga creciendo y consiga asentarse con éxito.

—¿Ha podido hablar con su familia sobre el seguimiento del Mundial en nuestro país?

—Sí, he podido hablar con ellos. Me dijeron que estaba siendo una locura. Incluso mi hermana, que trabaja en el Seminario Padres Paules de Andújar, organizó el visionado del partido con los residentes.

—Desde su experiencia personal, ¿fue un punto de inflexión la derrota por 4-0 ante Japón? ¿Cómo vivió ese día?

—Sí. Fue un baño de realidad a tiempo. Fue uno de los peores días en el Mundial. Porque nos veíamos fuera y fue un partido en el que España dejó muy mala imagen. Pero un día después hablabas con las jugadoras y las veías muy motivadas. Fue un aliciente para demostrar su nivel y a la vista está que lo consiguieron.

—¿En qué momento ya visualizó la estrella en la camiseta de España?

Justo después del partido ante Japón, en la goleada ante Suiza. Tuve un pálpito de que algo había cambiado al ver la reacción de las jugadoras tras la derrota ante Japón. Parecerá una tontería, pero de verdad que lo sentí así. De hecho, empezamos a ver señales que te daban seguridad de que este equipo tenía aura de campeón.

—¿Cómo se avecina su futuro profesional a partir de ahora?

—Espero que no cambie. Llevo poco más de un año en Relevo y creo que he encontrado mi sitio. Hago lo que me apasiona junto a compañeros increíbles.

Deportes
set (1 = 1)