Laura Martínez, la última esperanza jiennense del torneo

Partía como la peor clasificada en el ranking y tenía que comenzar a jugar en el torneo desde la preprevia, lo que no le situaba entre las teóricas mejores “balas” jiennenses en el torneo, sin embargo, la jugadora de 23 años es la única esperanza local para entrar entre las 32 mejores parejas del torneo, ya sea en categoría masculina o femenina, un hito que intentará lograr junto a la joven madrileña Aitana García.

Todos los focos se centrarán en Jaén el momento en el que los partidos comiencen a jugarse en la pista central, situada junto a la Catedral, pero para llegar ahí, desde la sombra, algunos jugadores tendrán que jugar durante varios días, desde el lunes, como podría ser el caso de Martínez y García, que finalmente no tuvieron que jugar la primera ronda y comenzaron su andadura en el torneo en la jornada de ayer.

Las hermanas Barciela no supusieron impedimento alguno en su debut, en el que les endosaron lo que se conoce en el argot como una bicicleta: 6-0 y 6-0. No solo no dieron ninguna opción a sus rivales, sino que tuvieron compasión alguna y buscaron cerrar el partido de la forma más rápida posible para irse a pensar en el siguiente encuentro, en el que se mediría, ya en la previa, a Merino y Carnicero, quienes pusieron en mayores aprietos a sus rivales.

Martínez y García comenzaron desplegando su mejor juego e imponiéndose con relativa comodidad en la primera manga por 6-3. El segundo set fue muy diferente. Igualdad y pequeñas diferencias fue la tónica general y solo un par de errores puntuales en el momento clave permitieron que Merino y Carnicero se impusieran por 5-7, enviando al partido al set definitivo. Jiennense y madrileña volvieron a mostrar su mejor cara y, lejos de venirse abajo por haber cedido el segundo set, se impusieron con facilidad por 6-2.

rivales. Ariadna Cañellas y Silvia López, dos jóvenes con mucha proyección, son el último obstáculo a superar para entrar entre las 32 mejores parejas del torneo. Su mejor ranking les permitió entrar en juego en la previa directamente, por lo que solo disputaron un encuentro antes del que les medirá a Martínez y García, un arma de doble filo con la que tendrán que bregar.