La victoria se le esfuma al Real Jaén en cuatro minutos fatídicos ante el Eldense (2-3)
Se acaba el sueño de los blancos en su regreso a la Copa del Rey contra un equipo que ya se veía eliminado en el minuto 86

Cuatro minutos fatídicos acaban con el sueño del Real Jaén en el regreso a la Copa del Rey y de un 2-1 se pasó al 2-3 final, entre el 86 y el 90, para un Eldense que se veía ya eliminado.
El Real Jaén interpretó a la perfección lo que es jugar un partido de la Copa del Rey ante un rival de superior categoría. Se cerró bien y dejó al rival la iniciativa, sobre todo en los primeros 20 minutos en los que el Eldense buscó resolver por la vía rápida y dejar tocado a los blancos, que a diferencia de la Liga estuvieron firmes en defensa y esperaron su momento. Dejaron atrás esa timidez inicial y empezaron a merodear el área de Aceves. Adri, Mario Martos, Cancelo y Javi Moyano conectaron muy bien por el carril derecho y ahí se fraguó el primer gol con una serie de apoyos en corto que acabaron con el gol de Brian tras una serie de rechaces. Delirio en La Victoria con un público ávido de alegrías después de siete años en el pozo de Tercera Federación. Fueron los mejores momentos del Real Jaén, que incluso mereció el segundo gol en otra acción de Brian que salvó Aceves con el pie. Pero no fue así y un desajuste defensivo, y en el 47, Miguel Marí empató a uno de remate de cabeza. Demasiado premio para el Eldense, pero las categorías, en la mayoría de las veces, determinan este tipo de partidos. Así ocurrió en la segunda mitad. El Real Jaén se levantó e, incluso, marcó el 2-1 con un soberbio remate de cabeza de Mario Martos tras un excelente centro de Joseliyo. Quedaba media hora y los alicantinos estaban tocados y el cuadro blanco cerró las líneas de penetración para evitar las llegadas visitantes. Fernando Estévez recurrió a Carlos Hernández y Ortuño y la jugada le salió bien al final. El goleador falló un gol solo después de una maniobra, pero cuando ya se cantaba el triunfo apareció Llambrich para empatar con un lanzamiento lejano y Ortuño en un penalti, en los minutos 86 y 90. Demasiado premio para el rival, pero es que a este equipo la suerte le dejó de sonreír hace tiempo. Es lo que toca vivir y seguir buscando.