El Movistar Inter pasa a semis tras aguantarle a un Palma que intentó la épica (5-4)
El Palma Futsal saca garra en la segunda parte para acortar el marcador
Un vendaval. En eso se ha traducido el juego del Movistar Inter en la primera eliminatoria de la Copa de España. En la primera parte, los azules se adelantaron rápidamente con un doblete de Pacheco, en el minuto dos y tres respectivamente. Estos tantos dejaron noqueado a un Palma Futsal que no hacía otra cosa que verlas venir.
Tan solo 5 minutos después llegó el tercer tanto, de mano de Cecilio, que, tras una transición rápida y una gran definición puso la bola entere los tres palos.
El Palma sacó entonces un poco de pundonor con un latigazo a la escuadra de Nunes, para poner un necesario 3-1 para las aspiraciones del equipo aspirante en el minuto 15.
Sin embargo, la ilusión duró poco y la respuesta no se hizo esperar. Nunes la devolvió de igual manera, poniendo el 4-1 en el marcador. Ni siquiera el doble penalti pitado a favor del Palma acortó distancias, mandado al poste. Tampoco la suerte estuvo de su lado, ya que se pidió la revisión de un posible gol fantasma que no fue.
El mazazo llegaba en el minuto 20, cuando Cecilio puso el 5-1 antes del descanso.
Ya al inicio del segundo tiempo, el Palma salió agresivo al Olivo Arena, conscientes de que se lo jugaban todo a una carta. En el minuto 28 Nunes volvió a ver puerta tras un rechace, batiendo a Jesús García para dar esperanzas a su equipo. Y vaya que si la dio, porque Gordillo recibió el balón en el 31 para girarse y poner el balón en la escuadra, imposible para el guardameta del Movistar: 5-3.
Tras grandes esfuerzos, se desató la locura en el 38 tras el gol de Cainan, que puso el 5-4 a dos minutos del final. El graderóa coreaba el “Sí se puede”, instando al equipo a consumar la remontada para mandar el partido a la prorroga. Tras varias arremetidas, el guardameta del Movistar metió una mano antológica para salvar los muebles y llevar a su equipo a semifinales de la Copa de España.
Sin duda, un partido inaugural a la altura de la competición y del estadio que hace de sede.
