Una mirada sutil a la vida y obra de Miguel Hernández

Una mirada a la vida del poeta Miguel Hernández, vista desde un caleidoscopio que no tiene otro objetivo que acercar su figura a espectadores menudos. La compañía de teatro La Paca representó en el Darymelia la obra “Miguel Hernández y los niños”, un montaje teatral que permite conocer la vida y la obra del poeta alicantino Miguel Hernández, cuyo museo y de su esposa Josefina Manresa se puede visitar en el municipio de Quesada.

La Paca teje una historia llena de magia, poesía, emoción y diversión. La azarosa vida del poeta y sus obras fluctúan en el espectáculo, insertadas en una trama de intrigas y enigmas que buscan captar la atención del espectador menos proclive a la poesía. Se trata de un montaje rico en contenidos y un homenaje y reivindicación de la labor de transmisión cultural y educativa que realiza el profesorado de los diferentes centros de enseñanza. El texto de la obra, como la mayoría de los que representa La Paca, es de Tomás Afán, codirector de la compañía.

La acción transcurre en una escuela. En la escena hay un hombre maduro que habla de su infancia, de un curso muy especial que cambió su vida. El año en el que conoció a Miguel, el poeta. Su maestra, en la escuela, una mujer comprometida y amante de la poesía, consiguió transmitir a una clase, en principio, poco receptiva, el gusto por la literatura. Todo un logro, pero aquellos eran tiempos en los que los alumnos disfrutaban con la lectura y las historias. Durante aquel año, solamente hubo una materia, la vida y la obra de Miguel Hernández. El personaje se sorprende al comprobar que algunos de sus recuerdos se materializan. Su maestra aparece como una presencia que se hace corpórea, más allá de su imaginación. Incluso ambos personajes, desde tiempos diferentes, llegan a interactuar. Finalmente, hubo un acontecimiento crucial aquel año. La función teatral, que por supuesto tenía a Miguel Hernández como protagonista, y que a pesar de las dificultades iniciales, nuestros personajes llegarán a interpretar, como culminación a un año maravilloso.

Los actores que dieron vida a los personajes, alternándose en cada función, son Pedro Jiménez, Carlos Aceituno, Paz Ortega y Vivi Alcántara. La escenografía es de Carlos Monzón y los técnicos son Ricardo Rivera, Paco Cazalilla y Raúl Díaz. La obra está dirigida por Tomás Afán y Mari Carmen Gámez. Esta última comenta que el objetivo de esta producción “es propiciar un acercamiento por parte del alumnado de los centros escolares y del público familiar en general con las poderosas palabras que nos legó el poeta y con la peripecia vital de él y de su familia, cuyo legado se debe extender y preservar a las nuevas generaciones, y una manera de hacerlo es a través del escenario”.