“Esto ha sido inimaginable”

Ana Ortega

27 oct 2019 / 16:12 H.

Una voz dulce y que enganchó a los asistentes. Así fue el directo de Ana Ortega. Tras terminar nadie se quedó con las ganas de más, porque la artista dejo toda su piel encima del escenario.

—Ahora que han pasado unas horas tras la final del concurso, ¿cómo se siente?

—Estoy asimilándolo aún, estoy súper contenta. Sinceramente no me lo esperaba. Reconozco que fui mi propia enemiga y mi cabeza me jugó una mala pasada, me hubiera gustado dejarme llevar más, pero una final es algo muy grande e impone. Sin embargo lo he conseguido, he entrado entre los tres finalistas y para mi ser la tercera es algo inimaginable e increíble. Estoy muy contenta, de verdad.

—Es la segunda finalista de esta II edición, ¿pensaban que podrían llegar tan lejos?

—Ni de broma. Desde un principio dije que empecé como un juego, empecé porque quería probar y tener un primer contacto cantando de cara al público y disfrutar. Durante el concurso me he enfrentado a compañeros que tienen un talento enorme y muchas tablas detrás y yo llegué sin experiencia, acostumbrada a cantar sola o con familia y amigos, y no me imaginaba para nada llegar tan lejos.

—Tiene la oportunidad de ir directamente a las semifinales de la tercera edición, ¿Qué cree que es capaz de ofrecer para el nuevo certamen y que le parece tener una nueva oportunidad?

—Pues me he planteado prepararme y formarme bien. Me gustaría soltarme más en el escenario y demostrar lo que soy capaz de hacer cuando estoy sola en casa por ejemplo. No quiero dejarme comer por el escenario, los nervios, o por la falta de costumbre en estas cosas. Me parece una recompensa justa tanto para nosotros como para los futuros participantes de la tercera edición.

—Estuvo a punto de no participar en la final por una afonía y, sin embargo, ahora es una de las finalistas ¿qué piensa de todo el recorrido hecho hasta ahora?

—Pues es cierto que hasta dos días antes estaba dudosa mi participación en la final. Estuve dos semanas sin poder hablar, reposando la voz, e intentando cuidarme. Tenía mucha impotencia y agobio, no quería perder la oportunidad, pero tampoco podía ensayar nada, lo pasé realmente mal. Sin embargo, conseguí tener voz suficiente para afrontar la final con muchas ganas y fuerza. Me gustaría recalcar el momento en el que canté Someone like you, que no sabía si iba a llegar a unas de las partes más altas del tema, en ese momento la gente se volcó conmigo con un mar de aplausos, me crecí, esto me hizo sacar la voz de no sé ni de dónde y me emocionó mucho, fue una sensación super bonita.

—A pesar de que este concurso al final es una competición, todos los concursantes os alegrasteis del éxito de los otros, ¿de dónde viene ese vínculo de cariño que se ha forjado en tiempo tan corto?

—Lo que más me ha gustado del concurso es la gente que he conocido. Yo creo que todos nos respetamos, cada uno destaca en su estilo y en su ámbito, además estamos en la misma condición, entendemos los nervios y las sensaciones de cada uno. Yo creo que la empatía y el respeto es lo que ha creado este vínculo entre todos nosotros.

—Desde las audiciones hasta la final, ¿cómo fue la experiencia?

—Al llegar a casa lo primero que hice fue coger mi dorsal del casting, que lo tengo guardado desde aquel día que me lo quité, y ponerlo junto al trofeo. Al principio me dio pena pensar que ya había terminado, porque me ha gustado tanto la sensación de cantar, gustar y transmitir que el hecho de pensar que ya no hay más fases me da mucha pena. Yo esta experiencia la describiría como una experiencia única e inolvidable como todo lo que suponen las primeras veces.

—Parafraseando uno de los temas que interpretaste, ¿se quedó con las ganas de hacer algo durante su participación?, ¿repetiría todo igual o cambiaría algo de su concurso?

—En realidad sí, me hubiera gustado demostrar más versatilidad, hacer canciones que fueran más diferentes entre ellas. Aun así repetiría todo tal cual lo he vivido y ha sido, no cambiaría nada porque esto me enseña en el aspecto artístico y personal.

—¿Animaría a otros jóvenes a participar en este concurso?

—Por supuesto, sin duda. Es una experiencia increíble, no encuentro una palabra exacta que lo defina, es algo que si de verdad te gusta cantar, tienes que aparcar los miedos y probar. Al final te das cuenta de que hay gente a la que le transmites, a la que emocionas, y ves que pesa más lo que te gusta y que no vale la pena esconderse.