El vilcheño García Navarrete sufre dos terribles cornadas

Daniel García Navarrete, novillero de Vílches, fue cogido por el toro cuando entraba a matar el tercero de la tarde en la madrileña plaza de Las Ventas. Tras esto se trasladó de forma inmediata a la enfermería del coso, pues fue prendido en el momento del embroque y, ya sobre el albero, el astado le lanzó varias cornadas y lo tuvo durante varios segundos entre sus pitones e, incluso, resultó volteado en diversas ocasiones por un toro que se ensañó con el vilcheño.

Era el debut del joven novillero en la más importante plaza del territorio nacional, y no le pudo ir peor. El “portal” web especializado Mundo Toro reflejó el parte médico del dóctor Máximo García Padrós: “Dos heridas por asta de toro, una en región cervical derecha, con dos trayectorias, una hacia arriba de quince centímetros, que bordea la glándula parótida alcanzando el ángulo de la mandíbula, y otra de diez centímetros, que alcanza el suelo de la boca y la base de la lengua. La segunda cornada en tercio distal del muslo derecho con una trayectoria hacia atrás, que rodea cara interna del fémur alcanzando región poplítea y que contusiona paquete vasculo nervioso y nervio ciático, produciendo destrozos en músculo vasto interno. Además, fractura en el tercio medio de la clavícula derecha y presenta erosiones y contusiones múltiples”; dice el parte.

Fueron unos momentos de auténtica angustia en el coso del barrio de Las Ventas. El horror sobrevoló. Se vivió en el tendido y en la grada una de las escenas más terribles que se recuerdan. El tercer novillo de La Quinta —una ganadería que no está entre las comerciales, sino que es torista— cogió al debutante Daniel García Navarrete, nacido en 1994.

Apoderado por Tomás Campuzano, debutó con picadores en la Feria de Ubeda, y ha toreado en la segunda novillada de Las Ventas al ganar el Alfarero de Plata de Villaseca de la Sagra: “Es una torero con una enorme tradición taurina, ya que su padre era picador de toros. Es una pena lo que ha pasado, pues García Navarrete es muy bueno, tiene mucha proyección”, asegura Enrique Alonso, redactor de Diario JAÉN y uno de los mayores expertos taurinos en el país. Con más de 450 kilos de peso, Coletero es como se conoce al astado que mandó al torero a la enfermería. Había sido una faena larga y laboriosa la que emprendió García Navarrete, que había generado infinidad de aplausos en los asistentes al coso situado al lato de la M-30. Fue, sin duda, un susto inmenso que, como se refirió en el graderio, pudo acabar en una auténtica tragedia. Previamente, al inicio de la tarde taurina en Madrid —una comunidad autónoma con gran tradición—, el banderillero Fernando Tellez estuvo a muy pocos centímetros de ser corneado y caer. Al final, Manolo Vanegas y Ángel Sánchez solventaron sus actuaciones con una gran soltura.