Bailén se convierte en el epicentro del séptimo arte
Más de doscientos trabajos de varios países participaron en la novena edición de cortometrajes
En el epicentro de la cultura. Un año más, Bailén apuesta por el sector cinematográfico mediante un concurso de cortometraje a nivel internacional. Se trata de la novena edición del Festival de Cortos “Bailén de Cine”, en el que participaron más de doscientos trabajos procedentes de diversos lugares del mundo. El objetivo del certamen es reconocer el talento mediante las obras de los autores de los cortos presentados. Las Concejalías de Cultura, Igualdad y Juventud del Ayuntamiento de Bailén fueron las artífices del concurso que durante tres días ofreció la oportunidad de visualizar los trabajos finalistas en unas proyecciones abiertas al público y gratuitas, además de la celebración de la gala de entrega de los premios.
Hasta la final consiguieron llegar La octava dimensión, Adagio, Priman los besos, En casa, Ciento uno, C, Roles, La soledad de la señora Vila, Padre, Jueces Invisibles, Pizza, La bañera, El bosque del silencio, Luna de miel, Trans, Entrevista atravesada, La trampa de la fama, Una mujer feliz, Fin, y Super in love.
La ceremonia de entrega estuvo conducida por Marta Fernández y Pepe Comino, encargados de dar a conocer los diez premios otorgados por el jurado. Así, el de mejor banda sonora original fue para Felipe Milano por El bosque del silencio, dirigida por Pedro Pacheco. El corto Jueces invisibles, del director Sitoh Ortega, consiguió el mejor interpretación femenina y masculina para Amada Santos y Adrián Vereda, respectivamente. El premio al mejor guión recayó en Pizza de Iñaki Rikarte, mientras el de mejor dirección fue para Toñi Martín por Una mujer feliz. El mejor cortometraje en la categoría #simedejaslohago fue a parar a Adagio, del director Yago Torres. En el caso de Fin, realizado por Álvaro García Company, consiguió alzarse con el galardón sobre temática violencia de género.
Por su parte, el Mejor Cortometraje recayó en La octava dimensión, del director Kike Maíllo, mientras que C, del bailenense Antoñoli Padilla, recibió el de mejor cortometraje local. Por último, Voxpopuli, fue premiado por los propios espectadores que asistieron a la proyección de los trabajos durante las jornadas en las que se desarrolló el certamen que ha cosechado un gran apoyo.