Método canguro: la importancia del contacto piel con piel
El Método Madre Canguro (MMC) consiste en el contacto piel con piel entre los recién nacidos y su madre. “Se trata de un método eficaz y fácil de aplicar que fomenta la salud y el bienestar tanto de los reciérn nacidos prematuros, como de los nacidos a término”, defiende la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según enumera, sus principales características son: El contacto piel con piel temprano, continuo y prolongado entre la madre y el bebé; se inician en el hospital y pueden continuarse en el hogar; gracias a él, los bebés pequeños pueden recibir el alta en un plazo breve; se trata de un método amable y eficaz que evita el ajetreo que predomina por norma general en una sala de pediatría ocupada por bebés prematuros.
Los primeros en presentar este método fueron los doctores Rey y Marínez en Bogotá, Colombia, según indica el organismo internacional, donde se desarrolló como alternativa a los cuidados en incubadora, “inadecuados e insuficientes”, y fueron dispensados a recién nacidos prematuros que habían superado dificultades iniciales y que necesitaban únicamente alimentarse y crecer.
“Casi dos décadas de aplicación e investigación han dejado claro que el MMC constituye algo más que una alternativa a los cuidados en incubadora. Se ha puesto de manifiesto que repercute eficazmente en el control de la temperatura, de la lactancia materna y en el desarrollo de vínculos afectivos referidos a todos los neonatos, al margen de su entorno, peso, edad gestacional y situación clínica”, defiende la OMS.