Martos narra la historia de los Hermanos Carvajales

El alcalde reivindica la Fiesta de la Aceituna y recuerda la importancia de la ciudad en deportes alternativos

24 ene 2019 / 11:46 H.

El alcalde de Martos, Víctor Torres, destacó en la Feria de Internacional de Turismo Fitur 2019 el potencial turístico del municipio, toda vez que la ciudad “no es solo olivar y aceite”, sino que también sobresale por sus eventos culturales de gran nivel, con una amplia programación de teatro, por ejemplo, o eventos deportivos a través de la marca “Martos, ciudad de los deportes alternativos”y todo ello sin olvidar la celebración de la Fiesta de la Aceituna, que precisamente hace un año fue declarada como fiesta de interés turístico de Andalucía.

“Martos es historia, es patrimonio”, añadió Víctor Torres, quien este año ha presentado dos iniciativas muy importantes en este ámbito, tales como el hecho de que se haya declarado el año jubilar tuccitano con la conmemoración del 800 aniversario del patronazgo de Santa Marta de Martos lo que ubica a la ciudad en el “epicentro internacional’, teniendo en cuenta precisamente que es el segundo año jubilar en la historia que se celebra en un municipio de Jaén así como se ha organizado una amplia programación de promoción cultural, turística y litúrgica, lo que hará que “numerosas personas conozcan la ciudad”.

La segunda iniciativa en la que el alcalde de Martos ha puesto el foco es la historia de los hermanos Carvajales y el rey Fernando IV el emplazado, quienes protagonizan una parte “muy importante” de la historia de Martos con una leyenda que “no solo es leyenda, también es historia” hasta el punto de que se ha puesto en marcha una ruta por la ciudad para descubrir paso a paso sus detalles. Víctor Torres ha precisado que esta ruta se articula en torno a seis paneles cerámicos ubicados en distintos puntos de la ciudad que revelan todos los detalles de esta historia. Esta iniciativa, tal y como ha recordado, se ha hecho realidad gracias a la iniciativa de dos marteñas. Se da la circunstancia de que la leyenda de los hermanos Carvajales ha sido recogida en crónicas y testimonios de la época además de obras literarias. “Se suma la literatura, la fantasía, la leyenda, la historia y el potencial de los productos turísticos y hacerlo de la mano de los recursos oleoturísticos, como el Cortijo El Madroño, también un elemento de oleotour, que forman parte del patrimonio cultural, histórico y elementos de promoción y dinamización de nuestro producto por excelencia, que son los aceites de oliva”, señala el regidor.