Temor a perder los jardines de la Plaza de San Roque

Hace apenas cinco años, recuerda la presidenta de la Asociación de Vecinos Guadalquivir, María del Carmen Navas, el Ayuntamiento remodeló la Plaza de San Roque, en la Avenida de Madrid. Se colocaron unos vallas para evitar el acceso a los parterres, lo que embelleció el entorno, ya que evitaba que las mascotas los estropearan y dificultaba los actos incívicos. “Son unos jardines muy agradables, en los que te puedes sentar a descansar”, argumenta la representante vecinal. Su sorpresa es que, gracias a su marido, porque ella no puede salir actualmente de casa, pudo comprobar que había personal municipal que trabajaba en la zona. En un primer momento, creyó que se dedicaban a la reparación del vallado, que sufrió daños el pasado 7 de marzo, cuando se registró una fuerte ventolera que derribó una palmera, pero, después, comprobó que se iban a eliminar directamente estos elementos. La presidenta de “Guadalquivir” se puso en contacto con la responsable de la federación vecinal Objetivos Comunes, Pepi Alcántara, para que se informara de lo que allí se iba a hacer. Esta, a su vez, trató de averiguarlo y llegó a preguntar a una de las responsables del mantenimiento de los jardines. La respuesta no les convenció y, en la asociación, temen que se vaya a poner en marcha un cambio que suponga la reducción de las zonas verdes. “Nos tememos que se copie el modelo de Deán Mazas, porque aquí hay un restaurante y bar, con la idea de ganar espacio a los veladores”, lamentó María del Carmen Navas, que lamenta que el Gobierno local no aclare sus dudas. Este periódico trató, sin éxito, de conocer los detalles del proyecto.

Además, lamenta que se invierta en esta zona del barrio cuando no se atienden otras necesidades históricas, como terminar el arreglo de la calle Ángel María Arregui. “Repararon uno de los acerados, pero hay otro que todavía está pendiente”, lamenta. “Lo peor es que haya dinero para esta plaza, que está bien, y no se haya acometido aún la intervención que necesita Menéndez Pelayo, que está totalmente destrozada”, sostiene.

A finales de febrero, el teniente de alcalde y concejal de Mantenimiento Urbano, Medio Ambiente y Área de Zonas Productivas, Juan José Jódar, presentó el “ambicioso” II Plan de Mantenimiento y Conservación de Calles”. Un proyecto que contempla la intervención en 68 calles, unos 79.650 metros cuadros, de casi todos los barrios de la ciudad y que cuenta con una inversión de más de 2 millones de euros. Explicó que se llevaran a cabo consisten en el arreglo del pavimento del tráfico rodado, trabajos de asfaltado, blandones, hormigón impreso, que se centrarán, sobre todo en los tramos o zonas deteriorada además de arreglos de bordillos, accesos de vehículos en acerados, colocación de imbornales, desmontaje de bolardos o barandillas o la adaptación de pozos y arquetas a la rasante de la vía. El proyecto se divide en 8 lotes y cada uno de ellos corresponde a una zona acción, con la intención de “poner a disposición de los empresarios la mayor cantidad de lotes y que las ofertas que reciba el Ayuntamiento consiga la cantidad de bajas posibles para que podamos seguir invirtiendo en actuaciones de esta envergadura”. Precisamente, el lote 5 cuenta con un presupuesto de 155.448,58 euros para intervenir en 14 calles de los barrios de Belén y San Roque, Alcantarilla y en polígono Quiebracántaros, que supondrá, según el Gobierno local, trabajar en 10.937,48 metros cuadrados de viales.