Suspenso para la educación en Andalucía

El informe PISA revela que los estudiantes andaluces no consiguen llegar a la media nacional y se encuentran a la cola

04 dic 2019 / 10:44 H.

Termina un ciclo y llegan las notas del curso. El duro trabajo y las horas de estudio se reflejan en la puntuación final y la emoción por conocer el resultado es cada vez mayor. Hasta que, sorpresa, aparecen dos grandes marcas en rojo. Dos suspensos. Matemáticas y Ciencias. Así lo refleja el Informe PISA 2018, el mayor examen internacional de competencias educativas que publica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). mantienen a Andalucía por debajo de la media nacional en matemáticas y ciencias y solo por delante de Canarias, Melilla y Ceuta.

En matemáticas, los estudiantes andaluces obtienen 467 puntos frente a los 481 en que se sitúa la media nacional y los 489 del conjunto de la OCDE. En ciencias, la situación es similar, con 471 puntos frente a los 483 de media en toda España y los 489 del conjunto de la OCDE. Una de las conclusiones destacables del Informe PISA es la constatación de grandes diferencias entre los resultados de los estudiantes del norte y los del sur del país. Por ejemplo, Galicia lidera la clasificación por comunidades en ciencias, con 510 puntos, un resultado superior a la media de la OCDE, casi 100 puntos más de los que obtienen los estudiantes de Ceuta, 415, que son similares a los de países como México o Colombia.

El conjunto nacional empeora sus resultados en el mayor examen internacional de competencias educativas, que se realiza cada tres años. En matemáticas, los estudiantes obtienen 481 puntos, cinco menos que en el anterior informe de 2015; y 483 puntos en ciencias, diez menos que hace tres años. Tanto en matemáticas como en ciencias, el promedio de los países de la OCDE es de 489 puntos. Por comunidades autónomas, Navarra logra los mejores resultados en matemáticas, 503 puntos —aunque pierde 15 respecto al informe de 2015—, casi cien puntos más que Ceuta, que cierra la lista con 411. Por detrás de Navarra y superando la media de los países de la OCDE se encuentran Castilla y León (502), Cantabria y País Vasco (499), Galicia (498), Aragón y La Rioja (497), Asturias (491) y Cataluña (490). La Comunidad de Madrid, con 486 puntos, y Baleares (483), se sitúan ligeramente por encima de la media nacional en matemáticas. Por debajo, están las comunidades de Castilla-La Mancha (479), Región de Murcia (474), Comunidad Valenciana (473), Extremadura (470), Andalucía (467), Canarias (460), Melilla (432) y Ceuta (411).

En la clasificación de ciencias, Galicia desbanca, con 510 puntos, a Castilla y León, que consigue 501, que pierde 18 en comparación con hace tres años. En esta competencia, los estudiantes de Asturias (496), Cantabria (495), Aragón (493) y Navarra (492) tienen mejores resultados que la media de la OCDE. Los de Cataluña, con 489, obtienen la misma puntuación del promedio internacional. Superando la media española en ciencias se encuentran la Comunidad de Madrid, La Rioja y Euskadi (487), y Castilla-La Mancha (484), mientras que por debajo se sitúan Baleares (482), Región de Murcia (479), Comunidad Valenciana (478), Extremadura (473), Andalucia (471), Canarias (470), Melilla (439) y Ceuta (415).

En lectura, la tercera de las competencias que evalúa el Informe PISA, los resultados españoles no se han publicado tras detectar “anomalías” en “un porcentaje significativo”. Al parecer, hubo estudiantes que resolvieron 20 preguntas en menos de 25 segundos respondiendo a todas con síes o noes, algo que sucedió en “un pequeño número de centros del país”. La publicación de los resultados queda aplazada sin fecha mientras se investiga.

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El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, lamenta que Andalucía “siga estando en el furgón de cola” tras conocerse los resultados del Informe PISA, y pide “unidad” al colectivo educativo para revertir los datos, porque la comunidad “no se merece estos resultados”. Imbroda destaca que “están tratando de reforzar” esas materias para que “las podamos relanzar” porque “a nadie le gusta recibir estos resultados”, y subraya que en estos diez meses al frente del Gobierno “la primera medida fue plantear un programa de refuerzo estival, donde se reforzaban las matemática y que fue muy contestado” y el cual “pretendemos integrar en un plan total para que ese plan de refuerzo esté presente a lo largo de todo el curso”. “Supone un refuerzo de materias fundamentales para nuestro niños, con acciones que pretenden dar respuesta” a esta situación, porque “no podemos seguir estando en el mismo estado”, apunta Imbroda, que añade que “existe un problema en nuestro sistema educativo y hay que acometer reformas”, para lo que solicita la colaboración de toda la comunidad educativa que permita revertir estos resultados que Andalucía “no se merece”.

Fuentes de ANPE-Andalucía declara que “una vez más, la comunidad esté en los puestos de cola del informe respecto a otras comunidades autónomas” y mientras “hay algunas por encima de la media de la OCDE, la andaluza está bastante por debajo”. Así, considera que esto hay que ponerlo “en relación directa con el contexto socioeconómico de la comunidad, con unos bajos niveles de renta y baja inversión por alumno en educación”. Ante esta última entrega del informe, ANPE Andalucía pone de manifiesto “la urgente necesidad” de acometer reformas estructurales “profundas” en el sistema educativo que “deben venir precedidas por un pacto o acuerdos de mínimos para mejorar los rendimientos educativos de nuestro alumnado y evitar la brecha existente entre las comunidades autónomas”.

CSIF señala que “se perpetúan grandes diferencias” entre unas comunidades y otras, y que el informe así lo “reafirma”. De este modo, el presidente de CSIF Educación, Mario Gutiérrez, se refiere a las diferencias en la inversión educativa por alumno entre las regiones, de modo que “mientras que la inversión por alumno en el País Vasco es de 7.200 euros y en Navarra de 6.200, en Andalucía son 4.900 euros, una diferencia sustancial que no creemos que sea en ningún caso objetivamente razonable”. “Lamentablemente no se tomarán con urgencia las medidas necesarias para mejorar la educación pública”, medidas que CSIF recuerda “lleva años demandando y que deben pasar por incrementar el número de profesorado y reducir las ratios, permitiéndonos llegar mejor al alumnado y adecuar la práctica docente para mejorar los resultados”.

Para CC OO Enseñanza los resultados de la evaluación PISA “demuestran las consecuencias y los efectos nocivos que está teniendo la Lomce sobre la calidad del sistema educativo”. Según el secretario general de la Federación de Enseñanza de CC OO Andalucía, Diego Molina, “la actual ley orgánica de educación, junto a otras normativas, ha convertido en estructurales las políticas de recortes en la inversión, en las plantillas docentes, en el personal de administración y servicios, y en los recursos y programas imprescindibles para sostener y mejorar la calidad y la equidad del sistema, propiciando el actual estancamiento y retroceso en la equidad y la calidad”. No obstante, para Molina “las diferencias entre las comunidades autónomas siguen siendo igual de escandalosas, especialmente entre las del norte y el sur, por lo que además del marco legal, es obvio que hay otros problemas”. Así, denuncia que Andalucía “es la segunda comunidad en menor inversión por alumno y con las ratios alumnado/unidad mayores que las estatales en todos los niveles educativos, salvo la FP Básica”.