Los emprendedores sin oficina se curten en plena recuperación

La crisis y la adaptación a las tecnologías crean este tipo de autónomos

01 ago 2016 / 13:30 H.

No tienen una oficina preciosa ni las instalaciones más modernas. Trabajan en una habitación de su casa o incluso se desplazan a los domicilios de sus clientes para hacer los servicios “in situ”. Son los “nuevos autónomos”. En Jaén ya surge un tipo de emprendendor que es “hijo” de la crisis y de la necesidad de adaptarse a los tiempos tecnológicos. Los que prosperan marcan, si no “el camino”, al menos una vía para evitar la lista de los desocupados.

“Son dos de los principales factores para entender por qué hay este perfil de emprendedor: el mal momento laboral y el auge de las nuevas tecnologías. Que hayamos vivido una etapa de bache económico propicia que los jóvenes tengan una mentalidad abierta. Tienen que ser más receptivos a las oportunidades que hay tras los cambios”, analiza Antonio Ruano, presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE).

Ruano apunta, en efecto, a la vertiente de “necesidad” que “mueve” a empresarios. “La clave es que ya no es imprescindible tener un sitio fijo. En Geolit, por ejemplo, cada vez se extiende más el modelo”, afirma el empresario.

Carmen Rueda, presidenta de la Unión de Mujeres Empresarias y Profesionales de la provincia, JAEM, señala una “realidad” que ya han puesto sobre la mesa líderes nacionales de partidos políticos como, por ejemplo, Albert Rivera: el autónomo “moderno” no tiene ingresos fijos. “Conozco a gente que no se da de alta, porque hay meses en los que no facturan absolutamente nada. ¿Cómo van a sufragar una cuota de cerca de trescientos euros? Trabajan en negro. Solo se adhieren al régimen de autónomos cuando saben que tendrán beneficios significativos”, certifica la jiennense. “No tiene sentido que se cotice por ganancias que no son reales. Debe ser al contrario”, tercia Ruano. El escollo del capital también explica por qué hay emprendedores que optan, al menos al inicio de su andadura, por prescindir de la sede convencional. “ El alquiler de una oficina conlleva una serie de gastos, algunos de ellos fijos: la licencia de apertura, la adaptación del local y del mobiliario. No se trata solo de la mensualidad”, indica Ruano a Diario JAÉN.

Juan Acosta, propietario de Nodo 23, abunda en la “carga” que implica abrir un comercio físico. “El empresario que emerge se ahorra todas las inversiones tradicionales al trabajar en casa o al atender al cliente en las instalaciones”, agrega. Acosta, conocido por sus conferencias sobre comercio y márquetin digitales en el ámbito de Geolit, cree que cualquier jiennense que se lanza a la aventura de trabajar por cuenta propia ha “desechado” algunas teorías, enterradas por la recesión. “Hace unos años, todos pensábamos en tener un despacho estupendo y disfrutar de grandes instalaciones. Entonces había dinero y la gente se lo podía permitir. Hoy, la consigna es reducir costes”, dice.

sectores. El empresario sin oficina fija se concentra, fundamentalmente, en los ámbitos de la informática y el mundo de las redes sociales. Los cursos de “community manager” —el responsable encargado de auditar una marca en internet y en las comunidades digitales— proliferan en los últimos tiempos. Si buena parte de la carga de trabajo se puede “despachar” con una mesa y un ordenador que tenga conexión a internet, ¿por qué no hacerlo desde casa? “Es cierto que hay cada vez más jóvenes que trabajan en sus hogares. Se dedican a hacer páginas webs y a mantenerlas”, especifica Juan Acosta. También hay otros nichos, como los profesionales gráficos. “Los fotógrafos que trabajan en citas sociales no precisan de estudio, aunque es cierto que si les va bien, lo abren. Algunos comienzan con la casa como oficina”, apunta Ruano.

En el sector de la peluquería y las esteticistas ya se producen sinergias: existen empresarios dados de alta que hacen servicios particulares —como las uñas— en salones de belleza ajenos, tal y como confirmó a este periódico la Asociación de Peluqueros y Esteticitas de la provincia.

¿Tendrá futuro el empresario que renuncia, en primera instancia, a la sede con su nombre? ¿Crecerá con el paso del tiempo? “Yo creo que sí, porque el joven que termina la Universidad y no encuentra trabajo valora la posibilidad de montar algo por su cuenta”, opina Carmen Rueda. Y cuestiona, por otro lado, la supuesta originalidad de no tener sitio: “Es lo mismo que pasaba hace años. ¿Cuántos abogados y médicos tenían sus consultas en la misma vivienda donde residían? No es algo nuevo”, indica. No parece, según dice, una “moda” pasajera.

“Trabajar en casa tiene ventajas al principio”
Daniel García Sánchez |
Desarrollador web
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Pertenece a ese grupo de jóvenes que optó por emprender una aventura empresarial sin “jefes”. Daniel García Sánchez es el desarrollador web de la empresa Piano Marqueting. Su función es mantener y mejorar las prestaciones del dominio que toma el nombre de la empresa. García, de veintiocho años, aclara que no está solo en su proyecto emprendedor. Lo acompañan dos socios, también veinteañeros: Álvaro Fernández (encargado de gestión de campaña en redes sociales) y Virginia Roldán (diseño gráfico y administración).

García, jiennense, acumulaba experiencia como asalariado antes de darse de alta en el régimen de autónomos. “Trabajé en Madrid y en Granada. Entonces era empleado de oficina”, dice. Ya ha tenido tiempo de comparar: “Está claro que, los meses iniciales, tener tu ‘oficina’ en casa supone grandes ventajas”, expresa el desarrollador web. No se trata, únicamente, del ahorro de costes o de las distintas atmósferas, las diferencias van más allá: “Considero que ser autónomo representa una oportunidad: el límite profesional cuando trabajas para otros lo establecen los jefes. En cambio, si eres el dueño o el socio de tu comercio, lo fijas tú. O mejor dicho, no hay límite. Puedes crecer más”, asevera el experto informático.

La otra cara de la moneda, explica el jiennense, es la “responsabilidad”. “Hay que ser muy exigente con uno mismo en el asunto de los horarios. Yo solo descanso los viernes por la tarde y el resto del fin de semana. Pero, a diario, trabajo desde las siete y media de la mañana hasta las ocho de la tarde”, apunta.

¿Merece la pena intentarlo? “Creo que cuando tienes un proyecto propio le pones ilusión y esperanza. Lo peor que puede pasar, si va mal, es que vuelvas a trabajar como asalariado”, concluye.

“No queda otra que agudizar el ingenio”
Francisco Mimbrera Acosta |
Ingeniero Técnico Industrial
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Es optimista después de más de un año de actividad económica como autónomo. Francisco Mimbrera, de treinta y ocho años, es ingeniero electrónico. Realiza parte de sus cometidos en el taller que tiene en su domicilio. “Lo que hago en casa está relacionado, sobre todo, con el ámbito industrial”, explica. Se refiere a aparatos que no son de uso doméstico. La otra parte de su trabajo consiste en desplazarse a las residencias de sus clientes. “Me ocupo también de reparaciones en fábricas”, añade.

¿Qué llevó a Mimbrera a trabajar por cuenta propia? “Abogué por este ámbito porque tengo mayor conocimiento, pese a que antes había trabajado en otro sector”, comenta. Los primeros días de su andadura empresarial estuvieron ligados a una idea: la publicidad. “Es fundamental. Me centré en crear una página web. Las sensaciones ya eran buenas: la gente me preguntaba por servicios concretos”, manifiesta. Considera que buena parte de su éxito dependerá de cómo explote el campo industrial. “No hay todavía tanta oferta en la provincia”, señala, y celebra que ya cuenta con clientes en Linares y Baeza. También he contactado con trabajadores que necesitan reparar placas eléctricas”, manifiesta. Es ahora cuando Mimbrera celebra los resultados que empieza a dar su apuesta: tiene una cartera de compradores consolidada y es más conocido. “Los frutos, ciertamente, los veo a partir de este momento, después de más de un año”, afirma el empresario jiennense.

Le gustaría, en el futuro, contar con una sede convencional. Lo intenta a través de Geolit. De momento, su realidad es que no hay más horario que el que decide el cliente. “Hay que agudizar el ingenio: intentas buscar una salida que sea rentable y que aporte a tu economía. Lograr empleo es complicado”, dice.

Solo dos de cada diez trabajadores por cuenta propia de Jaén tienen cobertura para percances
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El 25,25% de los autónomos jiennenses tienen cobertura completa en contingencias profesionales, según datos de la Asociación de Autónomos de Andalucía (ATA).

De los 38.982 emprendedores de la provincia, solo 9.844 están dados de alta en casos de sufrir accidentes. 2 de cada 100 autónomos andaluces (el 1,9%) que cotizaban por accidente de trabajo sufrieron un percance laboral en 2015, ya que de los 120.261 trabajador por cuenta propia que cotizaban por accidentes de trabajo se han producido 2.297 percances, el 19% del total en España (11.944). De estos imprevistos laborales de autónomos en la región, 13 fueron “in itinere.” Además de la baja incidencia de incidente, la siniestralidad laboral de empresarios en la jornada laboral se redujo en 2015 un 9,5%: si en el conjunto de 2015 los empresarios tuvieron 2.284 accidentes durante su jornada laboral, en 2014 se produjeron un total de 2.524, 2013 se cerró con 2.641 incidentes de trabajo durante el tiempo laboral de los autónomos que cotizan por contingencias profesionales.

En lo que concierne a la gravedad de los percances, en la provincia hubo 171 leves, según un informe elaborado por la ATA. Solo se dieron 3 casos “notables” en el periodo analizado (el año pasado). La provincia que encabeza la relación de las que sufrieron percances importantes es la “vecina” Granada, con 10 en un solo ejercicio. No hubo percances catalogados como “especialmente notables” en Jaén.

De los 2.284 accidentes, 497 fueron en los sectores de agricultura, ganadería, caza y servicios relacionados con los mismos y 943 en el sector servicios, el 41,2%. Es decir, uno de cada 5 fueron en el sector primario, según desgrana la ATA en un comunicado.