El PP y C’s aúpan a Ana Pastor a la Presidencia de la Cámara Baja

La exministra Ana Pastor es la nueva presidenta del Congreso tras derrotar al exlehendakari Patxi López en la segunda votación que se celebró para dirimir cuál de los dos aspirantes se convertiría en la tercera autoridad del Estado. La candidata del PP y de Ciudadanos consiguió ganar al aspirante socialista con el apoyo de 169 diputados: los 137 del PP (incluyendo los dos de UPN y el de Foro Asturias) y los 32 de los de Albert Rivera. Por su parte, López cosechó 155 papeletas, las 85 de sus compañeros socialistas (incluyendo al diputado de Nueva Canarias) y las 71 de los diputados de Unidos Podemos y sus confluencias territoriales. Uno de ellos no votó. Además, se contabilizaron 25 votos en blanco del resto de fuerzas parlamentarias, procedentes de Esquerra Republicana (ERC), Convergència (CDC), PNV, Bildu y Coalición Canaria (CC).

La hasta ahora ministra de Fomento en funciones, ya en la mesa presidencial del Congreso, fue la primera diputada en prometer o jurar la Constitución y asumir la condición plena de parlamentaria. Tras ella lo hicieron los demás miembros de la Mesa del Congreso: los vicepresidentes Nacho Prendes (Ciudadanos), Micaela Navarro (PSOE), Rosa Romero (PP) y Gloria Elizo (Unidos Podemos), y los secretarios Alicia Sánchez Camacho (PP), Juan Luis Gordo (PSOE), Marcelo Expósito (En Comú Podem) y Patricia Reyes (Ciudadanos).

Las tres representantes del PP juraron la Constitución, mientras que los de Unidos Podemos y En Común utilizaron su propia fórmula, que compagina el acatamiento de la Carta Magna con el compromiso de trabajar para cambiarla y para favorecer la justicia social. La recién elegida presidenta del Congreso, defendió durante su primer discurso como tercera autoridad del Estado que España en estos momentos necesita “más que nunca estabilidad, más que nunca diálogo, más que nunca consenso”. Así, Pastor, tras la elección de la Mesa de la Cámara Baja y después de que los 350 diputados electos jurasen o prometiesen acatar la Constitución, se estrenó en el cargo subrayando que el debate político y la confrontación de argumentos no deben ser el fin, sino el medio “para construir el país que los españoles desean y necesitan”. La que fuera ministra de Fomento aseguró que son “muchos” los retos que España afronta y el Parlamento debe ser “generador” de los consensos necesarios para conseguir lo que los españoles esperan de sus representantes: “Seguir creando empleo, seguir creciendo y consolidar la sociedad de bienestar para todos”. Pero también, prosiguió, el Parlamento debe contribuir a “fortalecer la confianza” de los españoles en las instituciones y “la esperanza del futuro de los que todavía no lo tienen”, debe ser la expresión en torno a valores como la libertad, la igualdad, la justicia social y el Estado de Derecho, y debe saber conjugar la pluralidad política que nació de las urnas el pasado 26 de junio.

En este punto, garantizó que sus señorías la encontrarán en la Mesa del Congreso con “la mejor disposición” al tiempo que todo su esfuerzo y capacidades para “no defraudar” al conjunto de los ciudadanos españoles.