Un grupo parroquial se prepara para convertirse en hermandad

Fue en septiembre de 2017 cuando, tras mucho trabajo, un grupo de personas consiguieron establecerse como grupo parroquial en la Basílica Menor de Santa María. Realizaron una dura labor previa, ya que para establecerse tuvieron que hacer unas intensas investigaciones, ya que el Obispado no permite que se generen nuevas hermandades. Es por eso por lo que tuvieron que rescatar documentación antigua de la Hermandad de la Tercera Caída, establecida en Linares desde hace muchos años. Necesitaron ayuda para descifrar el castellano antiguo de los documentos hasta que, finalmente, el Obispado concedió el permiso para que pudieran constituirse como Grupo Parroquial de Nuestro Padre Jesús de la Misericordia en su Tercera Caída, Nuestra Señora de la Victoria y San Juan Evangelista.

Desde entonces, el colectivo trabaja a marchas forzadas para conseguir, más tarde o más temprano, ser una cofradía con el fin de poder realizar una Estación de Penitencia durante la Semana Santa de la ciudad de Linares. José Antonio Lozano, presidente del colectivo, muestra la emoción de todo este recorrido, pero también el duro trabajo que se realiza día a día: “Los ingresos son pocos, solo tenemos una cuota de hermano de 10 euros al año y por ahora somos alrededor de 80. Tenemos que esforzarnos mucho para poder sacar adelante este gran proyecto”. Para ello, son diferentes actividades las que se han realizado. Viajes, torneos o conciertos son algunos de los actos que se llevan a cabo desde el grupo. El próximo será un viaje a Sevilla el Domingo de Ramos. Uno de los primeros proyectos fue el encargo de la primera imagen, Nuestra Señora de la Victoria. El escultor torrecampeño Antonio Jesús Parras Ruiz fue el encargado de su realización. Tras meses de trabajo, en junio del pasado 2018, se llevó a cabo la bendición de la imagen en la Basílica: “Para nosotros fue una emoción grandísima recibir a la Señora. Cuando la vimos todos nos enamoramos y se nos caían las lágrimas de ver el resultado del escultor”, afirmaba el presidente.

Entre los nuevos proyectos ahora están la Casa Hermandad, de la cual ya disponen y procederán a inaugurar en pocos días. Se trata de un espacio humilde situado en la calle Conde de Romanones, a las espaldas de la Basílica, junto al convento Santa Ángela de la Cruz. El objetivo es seguir con el trabajo para que, en poco tiempo, no se sabe cuánto exactamente, el grupo pueda establecerse como hermandad y realizar una Estación de Penitencia lo más dignamente posible. Desde la Junta de Gobierno animan a todo aquel que pueda estar interesado en pertenecer a esta familia, ya que se trata de un precioso proyecto que camina a buen ritmo y con ilusión.