Quejas vecinales en la Estación por culpa de la contaminación
Residentes de Linares-Baeza piden que las factorías tomen medidas correctoras

La contaminación ambiental y los malos olores tienen en jaque a los vecinos de la Estación Linares-Baeza. La Entidad Local Autónoma (ELA) linarense posee, en su término, varias factorías que expulsan a la atmósfera una “considerable cantidad de humos y gases”, como consecuencia de su actividad productiva. Una situación que resulta “muy desagradable” para los residentes, quienes claman a las empresas “que apelen a la concienciación y ejecuten medidas correctoras”, para evitar que el grado de impacto ambiental sea tan elevado en la zona, tanto en el núcleo como áreas adyacentes.
El malestar de numerosos vecinos es más que latente, pues ven cómo los tejados y las ventanas de sus viviendas registran restos de partículas, grasa y humo, procedentes de las chimeneas de las fábricas cercanas. La preocupación de los habitantes de Linares-Baeza se manifiesta por la antigüedad de las diversas orujeras y refinerías que allí operan, ya que, según explicaron vecinos a Diario JAÉN, “contaminan las aguas del río Guadalimar a través de filtraciones, desagües directos y vertidos, que resultan perjudiciales para la flora y la fauna piscícolas”.
A ello se suman las partículas en suspensión en el aire y los humos, de ahí que los residentes consideren oportuno “la instalación de filtros y sistemas de depuración”. En definitiva, desde la ELA también realizan un llamamiento a las administraciones para que se pongan manos a la obra y actúen contra esta situación, de tal forma que se hagan mediciones para comprobar los niveles de contaminación y se exija el cumplimiento de la normativa vigente en lo que se refiere a la emisión de polución y respeto ambiental. Por contra, otras empresas sí que cumplen las medidas de control pertinentes.
Y es que el problema con la contaminación no es algo nuevo para Linares-Baeza puesto que, desde hace ya varios años, los vecinos mostraron ante los organismos competentes su malestar por esta situación que afecta a la salud y el bienestar de la población. De hecho, el Ayuntamiento de la entidad ya interpuso, en varias ocasiones, diversas denuncias ante la Consejería de Medio Ambiente, aunque sin éxito, ya que se registraban unas cifras que se encuentran al límite de las sanciones.
Allá por junio de 2012, la Estación fue objeto de una emisión contaminante de cenizas susceptible de provocar problemas respiratorios. Años después, el intenso humo continúa envolviendo las zonas anexas a la pedanía linarense y las instalaciones ferroviarias, donde se registra una alta concentración de gases.