Denuncian cortes de agua y sabotajes junto a “La Cruz”

Conflicto entre vecinos por el uso del líquido elemento en parcelas

10 sep 2016 / 11:19 H.

Un grupo de pequeños agricultores de la zona de La Cruz, cuyas fincas son colindantes con el nuevo residencial de viviendas construido con posterioridad, denuncian ser objeto de “sabotajes y un corte total de su suministro de agua”. Una situación que, además de afectar a sus cultivos de olivar y zonas ajardinadas, también merma la situación de los animales domésticos estabulados que hay en las fincas y “hace imposible la habitabilidad en los cortijos”, de tal manera que algunos vecinos han tenido que desalojar sus casas por falta del líquido elemento.

Así lo señaló Jorge Vacas Zudaire, portavoz de los agricultores afectados, quien recordó que este conflicto no es algo nuevo, sino que se alarga en el tiempo. De hecho, según apuntó, los presuntos cortes y sabotajes se dan desde hace tres años. “Los responsables son los dirigentes de la comunidad de propietarios del nuevo residencial de La Cruz, colindante a las fincas afectadas. Ellos saben de sobra que, por una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, tienen denegada la concesión administrativa para extraer, en legal forma, aguas del pozo que abastece a esta zona”, señaló el portavoz.

Vacas Zudaire considera que los presuntos responsables “hacen caso omiso” a la resolución judicial y “se toman, presuntamente, la justicia por su mano”. “Los supuestos sabotajes se vienen sufriendo desde que el presidente del residencial de La Cruz ejerce ese cargo, hace aproximadamente tres años”, agregó.

El portavoz de los vecinos afectados detalló que, para llevar a cabo la reducción del suministro del agua, los autores de estos hechos se dedican a cortar las tuberías de cincuenta milímetros de grosor para sustituirlas por otras de tan solo veinte. Asimismo, las encierran en unas arquetas que han soldado para que no se puedan reponer.

“El punto más álgido de los sabotajes que sufre este colectivo de pequeños agricultores ha sido, además del sellado de la arqueta, un reciente incendio de las tuberías de riego por goteo de sus fincas. El fuego afectó a una serie de matas de olivar, encinas y monte bajo y, según la valoración inicial de los indicios encontrados por la unidad del Seprona personada en estas explotaciones, tiene todos los vistos de haber sido intencionado, con la finalidad de hacer desaparecer las tuberías”, afirmó Jorge Vacas.

El total de explotaciones afectadas por los presuntos cortes y sabotajes son doce hectáreas de cultivo de olivar con tres casas y cortijos. “Es un consumo de agua despreciable, teniendo en cuenta que de donde se nutre este pozo minero es del socavón de desagüe de las minas y hay agua en abundancia para dar suministro a todos los afectados”, comentó el portavoz de los vecinos.

Los pequeños agricultores muestran su malestar por esta situación y confían en la mediación del Ayuntamiento para evitar este tipo de sucesos. Así, tras los nuevos cortes y el incendio, los afectados solicitaron una reunión con responsables municipales que, en principio, tendrá lugar el próximo lunes.

“Se trata de buscar una solución consensuada y urgente, ya que los hechos que se denuncian están, por un lado, arruinando los cultivos de estas fincas y, por otro, haciendo imposible la habitabilidad de estas viviendas”, indicó Jorge Vacas.

Según el portavoz, la “solución” pasaría por constituir, definitivamente y en legal forma, una comunidad de usuarios de las aguas del pozo de La Cruz pues, según él, “hay agua suficiente para abastecer a todos”. “El ejemplo más cercano lo tenemos en la Urbanización de San Roque, que desde hace unos años tiene constituida una comunidad de regantes para administrar democráticamente todos los aprovechamientos de sus agua”, sentenció.

Hasta la fecha, según el representante del colectivo de pequeños agricultores, la actitud del Consistorio ha sido la de mantenerse al margen de un conflicto que sigue “vivo”.

El fallo del TSJA llegó en los meses finales de 2014