Clausura de unas Fiestas de Cástulo muy satisfactorias

13 may 2019 / 16:32 H.

Ya han pasado las grandes Fiestas de Cástulo. Unos días frenéticos que propiciaron el disfrute y la diversión de adultos y pequeños, con el recuerdo a su vez de la gran historia que recoge la ciudad. Después de un esplendoroso sábado, con el desfile de tropas y el Circus Maximus, comenzó un domingo deportivo en el yacimiento. El cross de Cástulo dio vida al lugar donde la historia de Aníbal e Himilce cobró protagonismo. Los representantes de estas dos figuras acudieron a la actividad a animar a los corredores, de la misma forma que lo hicieron los gladiadores. Por primer año, se realizó el cross infantil, con una gran acogida, y se finalizó la mañana con la visita teatralizada por el conjunto arqueológico.

Además de las actividades del Castrum y el Macellum, la tarde fue para la obra de teatro llamada "La historia en una tesela", que se representó en el Paseo de Linarejos a las ocho y media. El grupo teatral de las fiestas, compuesto por participantes de Linares, representaron la historia del Mosaico de los Amores. Una obra escrita y dirigida por Rubén Fernández, con la que se revivió el momento en el que se construyó el mosaico. Se descubrieron sus hitos y la historia que esconde cada una de las teselas como "El juicio de Paris" o "El mito de Selene". Después de ella, a modo de clausura, se realizó un espectáculo "multimedia". Ya casi a las diez de la noche comenzó esta actividad audiovisual, en la que se realizaron danzas con bailarinas contemporáneas, especialistas en fuego, música y efectos especiales. Emoción y tristeza anunciaban el fin de estas fiestas, tan esperadas por los linarenses.

Un balance muy positivo el que se realiza de las sextas Fiestas de íbero romanas de Cástulo. En este año ha habido varios cambios, pero muy satisfactorios. Por primera vez, el Paseo de Linarejos ha tomado parte protagonista, ya que en él se ha instalado el campamento romano "Castrum". Aquí se han llevado a cabo gran parte de las actividades de estos días, como las diferentes actuaciones teatrales, bacanal y danzas. Sin dejar de lado el mercadillo íbero romano (Macellum), que este año se situó en la Plaza del Ayuntamiento, donde anteriormente se había localizado el campamento. Cada año es más gente la que se implica en esta actividad. Este año han sido más de 600 personas las que se han caracterizado, con un aumento de la misma de 300 personas con respecto al año pasado. Alrededor de 100 niños también han querido participar, gracias a la implicación de las asociaciones de padres y madres de varios colegios. El circo es la actividad que más público recoge, ya que cada año se llena al completo la Plaza de Toros, en la que miles de personas acuden a ver este espectáculo. Comienza ya la preparación para las séptimas fiestas, en las que progresivamente se va consiguiendo una consolidación.