Avances en la regularización del suministro de la torre 2

Satisfacción vecinal por los avances que se producen en el proceso de regularización del suministro eléctrico en la torre 2 de la calle Blasco Ibáñez, tras el incendio ocurrido los primeros días del pasado mes de enero. Debido a que, durante varias jornadas, los residentes de este bloque de viviendas estuvieron sin luz y sin agua, tanto el Ayuntamiento como la empresa suministradora decidieron actuar con la mayor brevedad para restablecer los servicios básicos.

Así, tras llevar a cabo una reparación provisional, desde Endesa se procedió a instalar el cableado nuevo —ya que la instalación anterior quedó destruida por las llamas— y a proporcionar corriente eléctrica para que los vecinos no se vieran privados de luz. Con posterioridad, vendrá la instalación de los contadores nuevos y la correspondiente formalización de contratos para este servicio con los diferentes clientes de la compañía.

“Hemos visto muy positiva la forma de proceder, ya que lo habitual no es tener corriente hasta que no se instalen los contadores, pero como hemos tenido el tiempo tan malo con tanto frío, se decidió hacer la instalación y que, al menos, la gente tuviera luz y agua. Después ya vendrá el punto de regularizar la situación de los usuarios”, señaló el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Himilce, Juan José Reca.

Precisamente, uno de los objetivos del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía es que se efectúe la plena regularización de los servicios en la torre 2 de Blasco Ibáñez, en Arrayanes, donde se produjeron enganches ilegales a la luz. Fruto de una operación de este tipo fue el incendio que se desató en la madrugada del 5 de enero, cuando comenzaron a arder los contadores comunitarios. Así, con el fin prioritario de que dejen de producirse nuevos enganches, numerosos vecinos plantearon que la empresa suministradora instale una nueva puerta de acceso al cuarto de contadores con una cerradura diferente a la actual.

“Esto es algo que se dijo, de tal manera que solo tenga llave Endesa o hasta incluso la Policía, pero no está claro y habrá que estudiarlo para ver qué soluciones se pueden dar”, afirmó Reca.

El fuego que afectó a la torre 2 tuvo su origen en la instalación comunitaria y afectó por completo al cableado eléctrico del inmueble, de ahí que las viviendas no dispusieran de suministro eléctrico ni agua corriente. Las llamas ascendieron hasta cuatro alturas a través de las dependencias interiores, viéndose afectados por un intenso humo varios rellanos y cajetines del cableado ubicados a escasos centímetros de los pisos. La rápida intervención de un vecino supuso que no se produjeran daños personales, ya que trató de apagar el incendio con un extintor.