Asegurado el comedor para menores en situación difícil

El Ayuntamiento también trabaja en el reparto de alimentos y medicinas a mayores

19 mar 2020 / 16:36 H.
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Garantizar los servicios básicos durante los días de confinamiento. Ese es el principio básico de las iniciativas puestas en marcha por el Ayuntamiento de Linares para con los colectivos vulnerables durante el periodo de emergencia sanitaria por el coronavirus. Una vez adoptadas las medidas por el Gobierno de España, la Administración local ha querido hacer lo propio dentro de sus competencias. En este sentido, destaca el caso del comedor escolar. Muchos niños y familias son beneficiarios de un servicio necesario a diario para no descuidar su alimentación equilibrada. Así, se mantendrá una estrecha colaboración con la Delegación Territorial de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía y el área municipal de Bienestar Social para garantizar la continuidad del programa de refuerzo de alimentación infantil. Todos los menores beneficiarios seguirán recibiendo los tres servicios de comida (desayuno, merienda y cena). Ya se están dando los primeros pasos para contactar con las familias e indicarles dónde y qué días pueden recoger la comida para llevarla a sus casas correspondientes.

Otro de los servicios más importantes que se está prestando es el de voluntariado para cubrir las necesidades de las personas mayores que se encuentran sin asistencia. El Ayuntamiento está en conversaciones con entidades como Cáritas, Cruz Roja y otros voluntarios de diversas cofradías de la ciudad. Así, si es necesario, se hará un reparto de alimentos y fármacos a estas personas que están solas y no pueden salir de sus domicilios para adquirir productos de primera necesidad. Al respecto, ya se han creado algunos grupos de trabajo en la ciudad. Por un lado, la Hermandad del Santo Entierro emitió un comunicado para prestar su ayuda en esta tarea, al igual que Juventudes Socialistas de Linares. Ambos colectivos comenzaron a hacer recados a personas mayores y a quienes tienen dificultades de movilidad para salir a la calle. Según los testimonios recogidos de algunos voluntarios, las personas que reciben esta ayuda “están eternamente agradecidas”. Y es que el problema de estos ciudadanos no es solo que viven solos, sino que, aunque se encuentren bien de salud, no se recomienda que personas de avanzada edad salgan a la calle, ya que se hallan dentro de los colectivos sociales de riesgo.

Otras de las medidas que se ha puesto en marcha tiene que ver con el Centro de Transeúntes. El área municipal responsable eliminó el límite de pernoctación de tres jornadas y decretó que las noches que los usuarios pueden dormir en estas instalaciones serán las que dure el estado de alarma. Además, se redujo la capacidad de acogida para que los usuarios puedan tener habitaciones individuales. De este modo, habrá menos riesgo de contagio entre ellos, y es que no hay que olvidar que también pertenecen a un sector vulnerable. Así, mientras dure la cuarentena, estas personas tendrán asegurado un techo donde dormir.

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