Arrestado tras apuñalar a su sobrino durante una discusión

Apuñalamiento en Linares. Los agentes de la Policía Nacional detuvieron a un hombre que acababa de acuchillar a su sobrino tras una discusión familiar. Presuntamente, y según las fuentes, el agresor se había presentado en casa de su hermano con el fin de reclamarle la pensión de su madre. La víctima resultó herida en una pierna al interponerse entre su progenitor y el agresor, que había esgrimido una navaja.

En el momento de su detención, tanto el arrestado como sus familiares intentaron desprenderse de la camiseta manchada de sangre que llevaba puesta. Las patrullas de Seguridad Ciudadana fueron alertadas sobre una agresión con arma blanca que, al parecer, se produjo en la calle Calerín. A su llegada comprobaron cómo la víctima sangraba en la zona central de su pierna izquierda.

Una vez atendido por los agentes y alertados los servicios sanitarios, este les relató que su tío se había personado en su domicilio preguntando por su madre, exigiendo a su hermano la paga integra de su pensión; aduciendo que él se había encargado de ella durante el último mes. A continuación, se produjo una fuerte discusión entre los hermanos. El arrestado extrajo de entre sus ropas una navaja, al ver cómo amenazaba con agredir a su padre. La víctima se interpuso entre ambos resultando apuñalado en su pierna izquierda. Aún herido, forcejeó con su agresor con el fin evitar que las lesiones sufridas no fueran aún más graves. Posteriormente, emprendió la huida.

Una vez escuchado el relato de los hechos, los agentes alertaron a las demás patrullas policiales con el fin de localizar al agresor al que tenían identificado —un conocido delincuente de la Policía—. Dos agentes se desplazaron rápidamente hacia la zona trasera de la vivienda. En un descampado, sorprendieron al arrestado, que ya se marchaba del lugar.

Ante la presencia policial se mostró esquivo y nervioso pretendiendo abandonar la zona. Los agentes le preguntaron el motivo de su presencia allí y él manifestó que se encontraba haciendo deporte. Al mismo tiempo se desprendía de la camiseta que cubría su torso, instante en el que los policías se percataron de que contenía varias manchas de sangre y observaron cómo el detenido presentaba diferentes laceraciones en la parte del cuello y codo, así como magulladuras en el torso y la espalda. Vistos estos indicios, identificaron al presunto agresor y procedieron a su detención. Según los agentes, intentó lanzar la camiseta por los tejados cercanos, con el fin de deshacerse de ella. Incluso llegó a llamar a su hijo a gritos, menor de edad, al que pedía ayuda para evitar su detención. Los agentes consiguieron que no tirara la camiseta y pudieron custodiarla. Otra patrulla, mientras tanto, permanecía con el herido hasta que llegaron los servicios sanitarios. Este fue escoltado hasta el hospital, donde quedó ingresado en observación.