Ángel Llavero López, CEO de Meltio: “El futuro pasa por más innovación”

Es uno de los mejores “changemakers” del mundo, según Forbes, y ahora agradece el Premio Pyme del Año 2023 concedido por la Cámara de Comercio de España y el Banco Santander

09 may 2024 / 16:30 H.
Ver comentarios

LA ENTREVISTA

Ángel Llavero López de Villalta es uno de los mejores “changemakers” del mundo, según Forbes, y ahora agradece el Premio Pyme del Año 2023 concedido por la Cámara de Comercio de España y el Banco Santander. Todo suma, pero no a él, sino al equipo que hace que Meltio y su actividad sean una realidad. El futuro más inmediato es “enamorar” a más sectores.

—¿Cuándo y cómo nace Meltio?

—Meltio nace en septiembre del año 2019 y es fruto de otras dos empresas a través de una ‘joint venture’ entre ADDiTEC, compañía americana que había tenido la idea de un cabezal y de una patente, y Sicnova, que es mi otra empresa, que fabrica y comercializa impresoras 3D. Nos conocimos gracias a que una gran multinacional, ArcelorMittal España, S. A. había identificado esta tecnología y, después de un tiempo de espera, vio que necesitaba un ‘partner’ industrial del sector para acelerar la fabricación, el desarrollo y llevar el producto al mercado. Pensó en Sicnova porque era el proveedor oficial de aditiva de ArcelorMittal en España. A partir de ahí, creamos una ‘joint venture’ entre ADDiTEC y Sicnova.

—Recientemente fue reconocida en España con el Premio Pyme del Año 2023. ¿Cómo fue la experiencia y cómo lo valora?

—En primer lugar, todos los premios generan una sensación de agradecimiento a quien lo otorga, en este caso las Cámaras de Comercio de España y el Banco Santander. Agradecimiento, pero también felicitaciones al resto de compañeros de las otras empresas participantes, que eran miles y seguro que lo hicieron extraordinariamente bien. Luego, los premios tienen otra parte muy importante, que es ese sentimiento de orgullo por parte de todo el equipo de la empresa: compañeros, Dirección, accionistas... Tenemos la sensación de que hacemos las cosas bien y se nos reconoce. A eso lo llamamos salario emocional, una parte del trabajo la haces por dinero para poder vivir, pero hay otra que la haces por la satisfacción personal, y ese es el salario emocional que ha llenado las baterías de los compañeros. La experiencia fue muy bonita, que te entrega el premio la máxima autoridad de tu país en un lugar donde hay grandes directivos de las mejores compañías hace que te sientas reconocida y satisfecho porque el esfuerzo merezca la pena.

—A grandes rasgos, ¿a qué se dedica Meltio en Linares?

—Meltio es una empresa de base tecnológica que hace maquinaria industrial para la fabricación y reparación de piezas de metal. Utiliza la fabricación aditiva e impresoras 3D, pero cambia algunas reglas con respecto a lo que existía en el mercado mundial las últimas dos décadas. Por un lado, varía la materia prima. El sector se movía con polvo de metal en micras, mientras que Meltio utiliza hilo de soldadura. Como fuente de energía, el sector utilizaba un solo láser, nosotros usamos muchos que, apuntados en una misma dirección, consiguen la potencia deseada gracias a una suma aritmética. En la sede central de Meltio, en Linares, se hace todo: el I+D, el diseño, el ‘software’, el ‘hardware’, la ingeniería, el ensamblado, la puesta a punto, los servicios centrales de administración... Tenemos otras sedes en Estados Unidos, India, Alemania, Italia y Polonia para apoyar la comercialización y el servicio postventa. Todo lo demás se hace desde la central, que está en Linares.

—¿En qué radica la innovación que la empresa Meltio aporta a este sector?

—La innovación que aporta Meltio al sector radica en la capacidad, por primera vez en la historia, de disponer de una tecnología de fabricación y reparación de piezas de metal que es fácil de utilizar, no es cancerígena para los trabajadores, puede trabajar con distintos materiales en un mismo proceso industrial para una misma pieza, permite poder cambiar de material de manera muy sencilla, y reúne unas características sin igual para ser la primera tecnología capaz de fabricar o reparar piezas cuándo y dónde se necesite. Esto afecta directamente a sectores como la logística, la cadena de suministros, la obsolescencia de piezas, sectores remotos como la minería o la defensa, y otros muchos como la automoción, la aeronáutica y la electrónica de consumo. Nos permiten fabricar piezas de manera mucho más eficiente, con menos material, menos materia prima y menos energía, lo que nos hace más sostenibles. Al mismo tiempo, brinda la posibilidad de que, tanto las empresas como los países, tengan más autonomía. Disponer de herramientas que te permitan fabricar y reparar lo que necesitas elimina dependencia a terceros. Todos hemos visto lo que ocurrió con la pandemia de la covid-19 o cuando un barco tiene problemas en el canal, que bloquea el transporte marítimo. Este tipo de tecnologías vienen a ser una pequeña gran solución para un problema mundial, que es la interdependencia.

—Forbes lo considera uno de los mejores ‘changemakers’ del mundo. ¿Cómo se enteró? ¿Cuál fue su reacción?

—Estoy muy orgulloso de que me hayan incorporado en ese listado de Forbes. Estaba en una videollamada con unos clientes extranjeros cuando me enviaron un enlace por WhatsApp que, al principio, no supe muy bien qué era. Mi reacción fue mandarlo al grupo de mi familia, de mis padres, porque lo primero que pensé fue que mis padres iban a sentirse muy orgullosos de esa noticia. No deja de ser un reconocimiento más. Siempre digo que soy la cara visible del proyecto, pero los protagonistas son los compañeros, los ‘partner’, los proveedores, las entidades financieras... todos los que hacen posible que esto sea una realidad. Es bonito decir que eres un ‘changemaker’, pero si no tienes el apoyo de todo un ecosistema es imposible, pasarías de ser un soñador con poca capacidad de convertir sus sueños en realidad, así que lo que más me ilusión me hace es haber alcanzado aquello que pensaron un grupo de amigos. La satisfacción es el viaje hasta el objetivo. Estamos contentos, orgullosos y agradecidos porque aporta mucha visibilidad.

—¿Es importante el apoyo de las administraciones públicas para fomentar el emprendimiento?

—No tengo muy claro si el papel de las administraciones tiene que ser el de invitar a la gente a que haga emprendimiento, o si lo que tenemos que hacer es invitar a la gente a que haga innovación. No es importante crear una empresa, al menos no tanto como detectar cómo se puede solucionar un problema, que es el origen de la creación de la empresa. Las administraciones tienen que ser capaces de facilitar a toda la población un principio de igualdad de oportunidades. La tecnología democratiza a las personas y las administraciones deben crear el apoyo, dar el cariño y ofrecer los vehículos que faciliten el trabajo al emprendedor.

—¿Cuántas personas forman el capital humano de Meltio?

—Actualmente, Meltio está conformado por unas 110 personas.

—¿Cuál es el futuro más inmediato de la empresa?

—El futuro más inmediato de Meltio es seguir en el camino de la innovación, continuar con el desarrollo de tecnología, mejorar y estar pendiente de los pequeños detalles para mejorarlos y enamorar más si cabe a nuestros clientes para que, en los próximos años, sean numerosas las empresas, en diferentes sectores, que cuenten con decenas, cientos, miles de nuestras máquinas para trabajar durante 24 horas, los siete días de la semana, en la fabricación en serie. Nuestro objetivo es ser una tecnología no para fabricar piezas especiales, sino para tiradas industriales de producción. En la industria eso lleva tiempo en cuanto a comprobar y verificar la robustez de la tecnología, la aplicabilidad y la repetitividad. Esa es, actualmente, al fase en la que se encuentra Meltio. Trabajamos en toda esa línea y los próximos años que se avecinan lo hacen como años en los que tendremos una presencia industrial muy importante, que trataremos de aprovechar para conquistar a cuantos más sectores, mejor.

Linares