Mapa geológico de Torres

Al comenzar este periplo informativo, lo que deseamos sinceramente es poner en contacto, a través de “Diario JAÉN, algo más que un periódico”, a sus lectores con los pueblos de la comarca de Sierra Mágina. Continuamos un domingo más y ya van tres escribiendo sobre Torres. La dedicatoria de esta colaboración es para la familia de Manuel Sanjuan Castro y María Rosa Gallardo. Una gran familia, ejemplar en categoría humana y profesional. Por otra parte, no menos importante, dedicamos esta colaboración a Manuela Rosa Jaenes, hasta ahora redactora jefa de Diario JAÉN, así como a la profesional Ana Gómez, también personal de este diario, pues recientemente fueron elegidas, méritos de sobra atesoran, adjuntas a la dirección de Diario JAÉN. A la familia Sanjuan Gallardo, con “fuertes lazos familiares” en Torres y a las profesionales anteriormente citadas les decimos: “Gracias por ser como sois”.

Tras este prólogo, llegamos de la mano de “Pueblos y Ciudades”, oportuna y magnífica bibliografía publicada hace unos años, para hacer parada en el mapa geológico simplificado del término municipal del municipio de Torres donde están incluidos, en sus proximidades, diversos lugares como Monteagudo, además de Almadén, Aznaitín, Mojón Blanco y otros más, aunque con menores alturas, sin que nos dejemos en el rincón del olvido a los municipios de Mancha Real, Jimena, Albancehez de ¿Úbeda o Mágina? Su orografía cuenta, desde un principio, con materiales que son referentes de naturaleza, de distintas épocas. Y, desde luego, la depresión del Guadalquivir, las calzas publicadas del jurásico inferior, ligeramente plegadas formando parte del dominio intermedio en un municipio, Torres, asentado en la ladera del Aznaitín de Albanchez, con presencia de calizas y dólmenes del prebético, entre otros conceptos a recordar los de “Primero conocer, después amar”. En Torres y, concretamente, entre los endemismos de Sierra Mágina, dentro de su destacado parque natural, destacamos la presencia importante de cuatro formaciones vegetales, jurinea fontqueri, lithodora nítida, hellanthe frigidum y vicia glauca subsp giennensis.

En el tramo final de nuestra colaboración, algunas referencias que quien esto escribe estima interesantes relacionadas con la “Cueva del Morrón”. Para ello, no hay que perder de vista el hecho cierto de que la ocupación más antigua para esta zona se remonta al paleolitico final con una cronología entre el 15.000 y 10.000 A.C. Instante en el que pueden situarse pinturas rupestres que fueron hallados en la “Cueva del Morrón”. Dicho lugar es uno de los “santuarios rupestres” del periodo paleolítico que se ubican en la zona denominada “Alto Guadalquivir” y es que la “Cueva del Morrón” está en el cerro conocido con ese mismo nombre, al noroeste de la elevación pétrea cuya denominación es Aznaitín.

Con el tema la “Cueva del Morrón” y otros datos del municipio de Torres, deseamos volver el próximo domingo, esta vez “para no adelantar acontecimientos”, no daremos el título de la próxima colaboración relacionada con Torres, que será la cuarta entrega sobre este territorio.

Sin embargo, queremos añadir una posdata. Muchas gracias a quienes nos ayudan y nos leen porque ellos dan ánimo, y no poco, para seguir. Dos renglones llenos de emoción para Rafael Hodalgo Quesada, que se fue al más allá, pero no se llevó su inseparable bicicleta. Este cordobés, hombre cabal, mente privilegiada, vivía en Mancha Real, cuidaba personas mayores en Jaén. Quien esto escribe asegura que no muchas personas, más bien poquísimas, le impresionaron como quien se marchó por una dolencia repentina que nos dejó a todos boquiabiertos, sorprendidos, muy tristes... Allí donde estés, recuérdanos. Aquí donde todavía permanecemos no te olvidaremos mientras tengamos un “soplo de vida”. Y es que, que dolor cuando un amigo se va...