“La Guardia Civil es nuestra garantía de libertad”

Enamorado del cuerpo de la Guardia Civil desde su infancia, llegó a la presidencia de HaBeCu en el año 2012. Rodeado de un gran equipo, han conseguido que la provincia sea una de las que más socios tienen de toda España. Empeñados en difundir los valores de la Benemérita, desarrollan múltiples actividades a lo largo del año.

—Para quien no la conozca. ¿Cómo definiría HaBeCu?

—HaBeCu es una hermandad de amigos del benemérito cuerpo de la Guardia Civil. Se define como una asociación de ámbito nacional, privada, totalmente apolítica.

—¿Cómo se puede ser socio?

—Tenemos campañas de difusión, aunque lo que más funciona es el boca a boca. Para ser socio simplemente hay que rellenar unos formularios que se tramitan a Madrid y es la sede nacional la que confirma la afiliación. También es necesario que lo avalen dos socios.

—¿Cuáles son sus objetivos?

—Los principales ideales y fines de la hermandad se basan en el cumplimiento del ordenamiento jurídico; fomentar el amor a España y el respeto a los valores morales propios de nuestra cultura; contribuir al bienestar de los españoles ayudando a los más necesitados; apoyar a la Guardia Civil en el cumplimiento de las funciones que tiene asignadas, y reconocer el tradicional espíritu benemérito del cuerpo y el servicio que prestan al pueblo español.

—¿Desde cuándo es el presidente?

—El próximo mes de abril cumpliré ocho años como presidente. Asumí este cargo en el año 2012, tras fallecer el anterior presidente, Carlos Navarro.

—Este año se harán nuevas elecciones, ¿se presentará a la reelección?

—Hay que seguir un proceso para cumplir los estatutos que marcan el funcionamiento de la hermandad. En ellos se establece que cada candidato puede presentarse cuantas ocasiones considere, pues no hay un límite. En mi caso, reconozco que no tendría problema en dar un paso a un lado, pero mis compañeros me siguen animando para que repita otros cuatro años más. Tengo que reconocer que cuento con un equipo de lujo que facilita mucho el trabajo y con los que tengo una gran compenetración. Las elecciones son en abril, yo lo pensaré hasta entonces.

—¿De dónde proviene su amor por el cuerpo de la Guardia Civil?

—Siempre le he tenido mucho cariño a la Benemérita, pero la relación directa se la debo a mi esposa. Ella es hija y sobrina de Guardia Civil, sus hermanos también lo son. Además, tengo varios sobrinos, en concreto, tenemos diez guardias civiles en la familia. Ese, junto al cariño que siempre le he tenido a esta institución, fueron mis avales para presentarme a presidente hace ocho años.

—¿Incluso desde su infancia?

—Por supuesto. Recuerdo cuando llegaban a Úbeda y los veía con sus trajes y observaba el trato que tenían con mi padre, que regentaba un bar por la zona de la plaza de Abastos de la ciudad. Yo fui asimilando esos valores que terminaron de desarrollarse tras conocer a mi esposa.

—¿Cuáles son sus funciones?

—Me encargo de ser la cabeza visible y de la representación del colectivo en las distintas actividades e iniciativas en las que estamos presentes. Además, convoco y presido las asambleas, entre otros asuntos.

—¿Cuántos socios son?

—En la actualidad, contamos con 172 socios en la provincia. Tras las sedes de Madrid y Barcelona, somos el territorio que cuenta con el mayor número de socios. Un porcentaje bastante elevado proviene de Úbeda, con 90, aunque también hay de Jaén, Linares, La Carolina, Sabiote, Andújar, Baeza, Guarromán o Beas de Segura, entre otros. Además, contamos con socios de fuera de la provincia, como Valencia, Córdoba o Barcelona. En el ámbito nacional somos más de dos mil.

—¿Qué actividades e iniciativas desarrollan a lo largo del año?

—Nuestro año coincide con el curso académico, por lo que comenzamos la programación durante el mes de octubre, con las fiestas del Pilar. Colaboramos en el puesto de Úbeda, en la compañía de Baeza que es a la que pertenece Úbeda, además de hacerlo con la Academia y la Comandancía. El siguiente acto es la entrega de ayudas al estudio que hacemos en la Academia y en la Comandancía, a los alumnos que terminan la formación Secundaria. A los mejores expedientes se les conceden 500 euros. También ofrecemos apoyo a universitarios, de mil euros, que se entregan en febrero y, en tercer lugar, tenemos ayudas a hijos de guardias civiles con capacidades especiales. En noviembre celebramos un funeral en honor a los compañeros del cuerpo que ya no están. El año termina con una convivencia navideña en la que se entregan distinciones a los guardias civiles más antiguos, a los que tienen diez años de antigüedad, a los cinco y a los más mayores. Ese día también se organiza una charla de algún cargo dentro del cuerpo y, tras ello, compartimos unas horas de alegría. También damos un tricornio de cerámica a los servicios humanitarios más destacados de toda la provincia durante el año. En los meses de enero y febrero se celebra la asamblea, acudimos a la entrega del premio General Nieva, que se entrega en Madrid. En mayo se celebra un concierto de música Castrense. Cuando termina el curso lo festejamos con un viaje cultural. Otros ejemplos de actividades que organizamos serían la exposición de pintura del cabo mayor Joaquín Suárez en Baeza, que también se llevará a Úbeda o la charla de guardias civiles (mujeres), la última la de la comandante Silvia Gil en Úbeda, en el mes de marzo y con motivo del Día de la Mujer. Todo esto es posible gracias a la cuota de nuestros socios y los apoyos que tenemos.

—Son uno de los colectivos que más defienden el cuerpo. ¿Qué es para sus socios la Guardia Civil?

—Vemos al benemérito cuerpo tal y como lo visualizó el fundador de nuestra hermandad. Para nosotros es un cuerpo de orden público que no solo se preocupan de realizar acciones coercitivas o de castigo, sino que luchan por la convivencia entre todos los españoles, además de cuidar de nuestros campos, puertos y tierras de una manera impecable. En definitiva, son un cuerpo de policía cercano a la población que encarna unos valores de disciplina, orden, sacrificio y obediencia.

—¿Qué le parece que le vayan a dar la Medalla de Oro de la ciudad de Jaén a la Guardia Civil?

—Me parece un gran acierto. HaBeCu es una asociación apolítica y, por ello, que se reconozca su trabajo y labor, independientemente del grupo político que lo haga, nos parece fenomenal.

—En su propia web manifiestan que hay quienes odian al cuerpo. ¿Qué momento cree que atraviesa en cuerpo?

—Creo que cada vez somos más los que la queremos y la respetamos. En cuanto a la referencia de que hay personas que la odian, se debe a su labor como ordeno y castigo en ocasiones, que produce malestar, aunque cuando se reflexiona y uno se da cuenta de que cumplen con su deber para el bien de toda la ciudadanía, se cambia de opinión con rapidez, pues son los responsables de nuestra tranquilidad.

—¿Cree que están valorados?

—Según mis conocimientos y mis contactos con compañeros de otros territorios, creo que por parte de la ciudadanía sí y que se demuestra.

—¿Cuáles son los próximos acontecimientos?

—El próximo 25 de enero se realizará la entrega del diploma de socios de honor, en la academia de Baeza, al coronel Jiménez, director de la academia, y al coronel Ortega, jefe de la comandancia hasta hace pocas semanas. Ese día nos acompañará el presidente nacional, Francisco Almendros, general retirado.

—¿Cuál es el deseo de HaBeCu y de su presidente para el futuro?

—Lo que más nos gustaría es que se unieran más socios, especialmente los jóvenes. Nos encantaría que tomarán el relevo las nuevas generaciones y que se dejarán invadir por el amor a la Benemérita, a los que recibiremos con los brazos abiertos. De hecho, tenemos precios económicos para menores de 25 años.