Relato apasionado del PCE de Jaén

El jiennense Luis Segura Peñas confiere identidad propia a la historia del Comunismo en la provincia en el libro “Comunistas en tierra de olivos”

10 nov 2019 / 12:25 H.

La historia de Jaén en el siglo XX no puede entenderse sin la presencia, actividad, importancia y perspectiva del Partido Comunista. Es algo que lo han venido dejando claro, y bien documentado, los historiadores que han investigado y dado a conocer la historia de Jaén a lo largo del siglo XX, fundamentalmente quienes la han acometido desde la más escrupulosa historiografía moderna. Es el caso Cobo Romero, Santiago de Córdoba, Luis Garrido, Salvador Hernández o Sánchez Tostado, entre otros. Sus obras contienen un cúmulo de datos e informaciones sobre el PCE en Jaén, si bien, ubicados en un contexto general de la provincia. Gracias a ellos, hemos podido conocer, como “microhistoria” o “historia aneja”, la trayectoria del comunismo en la provincia, particularmente desde los primeros gérmenes durante el Trienio Bolchevique hasta los años de la represión franquista, pasando por el lento devenir durante la Dictadura de Primo de Rivera, la progresiva presencia durante los primeros años de la II República, el auge de militancia en plena guerra y las duras cribas de la postguerra.

Hacía falta profundizar en la travesía por la clandestinidad hasta la legalización en 1977. Es más, había que cuajar un relato propio, no adosado al relato general. Y es precisamente esto, dotar de una historia propia al partido comunista en Jaén, lo que ha hecho, y lo que da más valor, al libro “ Comunistas en tierra de olivos. Historia del PCE en la provincia de Jaén ( 1921-1986)”, escrito, tras largo tiempo de trabajo, Luis Segura Peñas ( Torres, 1955). Es, a mi juicio, lo que ha pretendido el autor con este libro, dar identidad propia a la historia del comunismo en la provincia. Y sé que es así porque vengo conociendo al autor desde 1975, tratando con él , como periodista y por lo tanto con divergencias, en sus años de concejal en Linares y ocupado en cargos orgánicos.

Luis Segura, siempre, no ahora sí, mañana no; siempre, creyó en el Comunismo como el modelo para lograr una sociedad sin clases, igualitaria; y lo ha demostrado en su larga trayectoria de militancia y responsabilidades orgánicas. Recuerdo que estábamos juntos cuando se anunció la muerte de Franco; y él, comunista ya desde la cepa, quizás por su carácter y su timidez, no brindó por su muerte, pero sí que, entonces, con 20 años ya tenía claro qué hacer y a qué partido se afiliaría. Luis ha sido, es y será, comunista. Y, ahora, con este libro se consolida, además, como cancerbero de la memoria del comunismo en Jaén. Luis Segura no construye un relato más sobre la historia del Partido Comunista en Jaén; sino que construye el único relato hasta hoy sobre este partido. Y lo hace, como honestamente declara en la extensa introducción que precede al libro, “ no de forma neutral, pero tampoco arbitraria”. No hay que saltarse la introducción, algo , por otra parte, más común de lo que se cree; porque no es una introducción al uso, sino una profunda contextualización del hilo conductor que atraviesa el medio millar de páginas de este libro publicado por la Universidad de Jaén dentro de la colección “Historia” de “UJA Editorial” y que salió de la imprenta el 13 de diciembre del pasado año de 1918, coincidiendo con el 123 aniversario del nacimiento de Dolores Ibárruri, “La Pasionaria”. Es una introducción clave para entender el quién, cómo, cuándo, dónde y porqué del PCE en Jaén desde 1919-20 hasta hoy 1986. Y digo que es clave porque en 13 páginas deja claro el autor que no es neutral , no solo porque no crea en la neutralidad de los relatos históricos, sino, además, porque “está hecha desde la conciencia militante”, con pasión, con brújula y destino claro. No ser neutral no implica para el autor ser “arbitrario”, o que se trate de un trabajo propagandístico, panfletario o manual de instrucción para captación de militancia. Ni mucho menos. Se trata de un trabajo que está avalado por fuentes bibliográficas autorizadas, por documentación detallada, extraída de Archivos diversos. Junto a estas fuentes que avalan la seriedad del estudio, el autor tiene en cuenta los testimonios orales de muchos militantes a quienes ha conocido durante sus casi 40 años, gran parte de ellos, en cargos orgánicos y recorriendo toda la provincia y no pocas veces. Su incursión en el campo de las Historia parte del concepto marxista de la Historia, siguiendo los criterios de la historiografía marcados por prestigiosos historiadores como Tuñón de Lara, Viñas, Casanova, Francisco Erice , David Ginard o Sánchez Tostado, así como testimonios recogidos por Irene Falcón, nieta de la escritora y activista ubetense, Enriqueta de Lamo; Ignacio Gallego, Nemesio Pozuelo, Dolores Ibárruri, Manuel Anguita Peragón, entre otros muchos. Es verdad que en el aparato bibliográfico echo de menos algunas citas importantes sobre el PCE en Jaén incluidas en las memorias de Marcelino Camacho, que trabajó dos años en la empresa Santa Ana de Linares; o el libro escrito por Felipe Alcaraz contando su recorrido por la provincia reorganizando el PCE; Tampoco aparece como fuentes, lo que no quiere decir que no las haya consultado, la extensa documentación sobre el papel del PCE en la primera y única intervención de las Brigadas Internacionales en el Frente Sur. Echo en falta una más exhaustiva e importante fuente, la periodística provincial, conservada en hemerotecas, y de gran valor.

Le aconsejo , para una reedición, la lectura de las crónicas y reportajes realizados por el corresponsal de Izvestia en España, Ilya Ehremburg, con cuya biografía vengo bregando desde hace tiempo. No niego que la haya consultado, si bien creo merece algo más que un simple enunciado de las cabeceras y alguna que otra crónica conocida. Pero, y pues de una recensión al libro se trata, solo pretendo recordar algunos testimonios, lo cual no quita valor al aparato científico que muestra la variada, equilibrada y fundamental fuente bibliográfica, documental y oral. Más allá de exponer el índice, que por sí mismo habla de la riqueza del libro, quiero destacar lo que, a mi juicio, tiene de importante este libro, así como las razones por las que lo considero imprescindible en los anaqueles de los muchos jienenses interesados en nuestra Historia. En primer lugar porque, como he dicho antes, el autor, en esta obra, ha dado vida propia al relato histórico del PCE en Jaén. Hasta ahora, todo lo que se ha ido conociendo, que ha sido valioso y cuantioso, pero diseminado y difuminado en la Historia de Jaén. En segundo lugar porque este relato ha logrado que la singladura de un partido y un proyecto político-social, deje de ser “microhistoria” para ser “Historia”. Y en tercer lugar porque es una historia con nombres y apellidos de muchos hombres y mujeres que, gracias a este libro, salen del olvido. Podría haberse limitado el autor a trazar el devenir de la organización en Jaén, como parte del devenir de la misma en España, pero no.

Una de las grandezas del libro es que hace justicia a las personas. Cada testimonio personal recogido, hace que el lector quede atrapado. No se cuenta aquí solo lo que ya muchos han contado del papel del PCE en la provincia de Jaén en el último siglo, sino que se detiene en detalles personales, en testimonios vivos, algunos de los cuales son nuevos y llegan a emocionar al lector. Aunque, como él mismo confiesa, no se trata de un relato neutral como tampoco arbitrario, pues está bien fundamentado pero sí un relato, quizás en un apéndice necesitaría reseñar, aunque otros lo han hecho, que en las actas de los comités locales, como sucede con el de Fuerte del Rey, Radio Comunista, se incluyen acuerdos de ejecuciones sumarias, expropiaciones fuera de ley y diatribas internas. También esos datos conforman la Historia, aunque para algunos se trata de sombras, para otros son actuaciones necesarias para instaurar el estado permanente de revolución.

Acabo con unas palabras del autor del breve y contundente prólogo, Ernesto caballero, un referente comunista para el autor, quien dice “ En esta obra quedan reflejados el trabajo de los comunistas de Jaén en defensa de las libertades, por la paz y la democracia; un trabajo pagado con sangre, con años de cárcel, torturas y hambre”.