¿Y el dinero del alquiler?

María del Mar Ruiz Cano no tiene hijos y da “gracias a Dios” por ello. Ella es una de las 702 personas a las que la Junta de Andalucía reconoció, el año pasado, el derecho a beneficiarse de las ayudas al alquiler que puso en marcha para aquellos ciudadanos faltos de recursos económicos. Pero no ha visto ni un solo euro, a pesar de que la Administración las planteó como pagos mensuales. En lugar de recibir el 40% del coste del alquiler, como estaba estipulado en las bases de la convocatoria, desde el pasado mes de octubre —cuando su marido se quedó en paro—, la pareja ha acumulado una deuda de “4.200 euros” con la arrendataria del inmueble y están al borde del desahucio. “Le digo: ‘A ver cuándo se lo puedo pagar”, relató a los periodistas. Pero las ayudas siguen sin llegar y teme que, en septiembre, la propietaria de la vivienda diga “hasta aquí” y la desaloje.

Es un miedo que comparte con Catalina Piqueras —en este caso, madre de un adolescente de 14 años—. “Los echarán a la calle porque son pisos de particulares y estos tienen que pagar a su vez las hipotecas de las viviendas”, argumentó la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Jaén, Ana Cárdenas, que criticó que la Junta de Andalucía haya publicado recientemente una nueva convocatoria de ayudas al alquiler para este año sin haber abonado aún las del pasado.

“¿Dónde está el dinero?”, interpeló Cárdenas, a las puertas de la Delegación de Fomento y Vivienda, en el Polígono del Valle. A su lado, Isabel Mateos, miembro también de la plataforma, hizo hincapié en que el dinero que el Gobierno andaluz reservó para estas ayudas procedía de “fondos estatales”. “¡Lo único que tenía que hacer la Junta era gestionar! ¿Qué ha hecho?”, preguntó Mateos.