Unión vecinal para devolver a la Puerta de Martos a su lugar
Rafael Cámara reivindica la historia del barrio y el asociacionismo en el pregón de sus fiestas
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El barrio jiennense de la Puerta de Martos dio el pistoletazo de salida a sus fiestas en un ambiente distendido y alegre, en el que se pudo saborear la estupenda convivencia que caracteriza a los vecinos que pueblan estas calles. Comenzó con el desfile de disfraces y cabezudos, haciendo las delicias de los más pequeños, para abrir más tarde la barra dispuesta para la ocasión. A las 21:00 horas, el pregón dio la bienvenida a las fiestas. El encargado de pregonar este año los festejos fue el presidente de la Asociación Sociocultural de Voluntariado Iuventa, Rafael Cámara, quien fue precedido en el turno de palabra por el presidente de la Asociación de Vecinos Puerta de Martos, José Manuel Colmenero, y el pregonero del año 2023, Carlos Linares. Cámara dividió su pregón en tres partes: una histórica, una segunda más activista, relacionada con el asociacionismo y, por último y para terminar, una tercera parte más íntima y cercana a sus vivencias y sentimientos. Este barrio “encierra una rica historia que sale a la luz apenas nos pongamos a investigar o se haga la más mínima obra. Aún hoy, entre las casas de estas calles, se vislumbran restos de la primitiva muralla”, explicaba Cámara.
No quiso dejar escapar la ocasión de poner en valor el barrio “en el marco del Conjunto Histórico, del que es parte indivisible como bien defienden los miembros de la asociación de vecinos”. El pregonero no dudó en reivindicar que “la imagen tradicional de nuestras casas, calles y plazas ha sido traicionada constantemente, dando paso a arquitecturas vulgares y a burdas intervenciones en espacios públicos con materiales o diseños poco respetuosos con nuestra identidad local”. Para regenerarla, esgrimía, “es necesaria una decidida implicación ciudadana y política”. Por último, recordó ante sus vecinos aquellos recuerdos de los que, parafraseando a Antonio Machado, decía: “una parte de mi infancia son recuerdos de una calle de Jaén y una casa blanca volcada a una escalera blanqueada”. Relataba así unas vivencias que comenzaron con su bisabuelo, Juan Viedma, y que pasaba por toda su descendencia. “Trozos de vida y cuartos del hambre, memoria íntima y familiar”, con la que Cámara quiso homenajear los orígenes no solo de su familia, sino de la fraternidad que une a un barrio entero.
“Mi familia lleva en este barrio desde hace más de 100 años. Yo tengo 90, y para mí significa toda mi vida. Aquí nací, aquí me casé y aquí sigo aún”, detalló Josefa Cruz. Para Fátima Díaz las fiestas “siempre son entretenidas y muy amenas” y destaca la evolución que han tenido, “de juntarse en una casa todos a tener una asociación”. “Llevo poco tiempo en este barrio, aunque lo conozco. Hay bastante buen ambiente, y como vivo cerca hemos decidido venir con los niños”, compartió Cristóbal Díaz. Paqui Cabanillas resaltó la importancia de hacer comunidad, con un fin de semana para juntarse todos y pasar un buen rato. “Venimos todos los años, desde hace muchos. Tengo 72 años, y siempre he vivido aquí. Nos juntamos todo el barrio, y gente de fuera también”, manifestó Andrés Díaz.
