Una tromba de agua corta el tráfico
La tormenta anega la carretera de Fuerte del Rey y atrapa decenas de vehículos


La salida del verano trae consigo unas tormentas que han causado estragos, durante las últimas semanas, en diferentes puntos de toda la provincia jiennense. La última la vivieron, la tarde de ayer, habitantes de la capital. Alrededor de las 18:30 horas las nubes que oscurecieron todo el cielo de la ciudad de Jaén comenzaron a descargar agua. Sin embargo, no en todos los barrios se vivió de la misma forma, en muchos tan solo cayeron algunas gotas sin importancia acompañadas, eso sí, en toda la ciudad, de unas fuertes ráfagas de viento.
Una de las ubicaciones en las que la tormenta sí que descargó con toda su fuerza fue en la carretera de Fuerte del Rey, muy cerca de la salida de la capital. La carretera JA-3411 estuvo cortada al tráfico desde las 18:30 horas hasta pasados más de sesenta minutos. Decenas de vehículos se vieron atrapados por la fuerte tromba de agua que se convirtió en riadas de fango con una rapidez aterradora. La fuerza de los ríos que se formaron en cuestión de minutos hicieron imposible el paso de cualquier tipo de turismos y camiones que se encontraban en la carretera en cualquiera de los dos sentidos.
Un dispositivo de la Guardia Civil se desplazó hasta el lugar y cortó la circulación cuando amainó la tormenta, para que una excavadora quitase las consecuencias de la misma. Las riadas dejaron el asfalto totalmente inundado de barro y fango que llegaba, en ciertos puntos, hasta la altura de los tobillos. Además, una gran cantidad de ramas y maleza también fue arrastrada por el agua. Las zanjas ubicadas a ambos lados de los indistinguibles arcenes estaban anegadas y el campo de olivar de los alrededores también se vio afectado. Cerca de las 19:00 horas, una retención de más de una decena coches se mantenía en fila en pleno barrizal, muchos conductores decidían dar la vuelta para volver, pero otros tantos solo podían acceder por este camino y les tocó esperar.
La excavadora tuvo que trabajar a destajo para limpiar el vado ante la mirada de los pacientes conductores y la supervisión de los agentes de la Guardia Civil, ocupados en redirigir el tráfico desde que cesó la lluvia.
No es la primera vez que este punto de la carretera JA-3411 que una la capital jiennense con Fuerte del Rey termina en este estado tras una fuerte tromba de agua. La situación geográfica de la carretera, sumada al pequeño vado que conforma y el campo que la rodea, la hacen sumamente inundable. Una vez apartado el grueso del fango que podía atrapar los vehículos, los agentes de la Guardia Civil restablecieron el tráfico en ambos sentidos.