Una fábrica arde en La Carolina

Un aparatoso incendio sin heridos, declarado sobre las cinco de la tarde de ayer, quemó las dependencias principales de oficinas y planta de producción de la antigua factoría Cooperativa Andaluza de Etiquetas Tejidas Caet, ubicada en el área de servicio de la carretera Madrid-Cádiz junto al kilómetro 267, en La Carolina. Las llamas ocasionaron grandes daños materiales en la factoría, sin actividad desde que, hace casi dos años, fue cerrada por una cooperativa de trabajadores que se hizo cargo de ella.

Una llamada alertó del fuego a los miembros del Parque de Bomberos de La Carolina, que se desplazaron, en primera instancia, con dos camiones de extinción de incendios y tres efectivos. Cuando llegaron al lugar, las llamas salían por los ventanales del edificio. Incluso las vigas de hierro, que soportaban la planta alta —dedicada a oficinas—, estaban al rojo vivo, lo que ocasionó la caída de solería, el mobiliario y las paredes. Precisamente la parte de abajo fue la que avivó más el fuego debido a que en ella se encontraban almacenados paquetes textiles, rollos de hilo y etiquetas tejidas, que quedaron abandonadas tras el cese de la actividad laboral.

Posteriormente, se unieron a las tareas un camión de riego de agua no potable y personal del Ayuntamiento, además del jefe de Servicios municipal, cuya función principal fue abastecer a los dos vehículos del parque de bomberos. A las siete y cuarto de la tarde quedó controlado el incendio, motivo por el que los bomberos se afanaron en enfriar toda la zona interior, a través de las ventanas que dan a la fachada principal de la planta, cuyos cristales quedaron rotos debido al efecto del calor. También lanzaron espuma sobre los rescoldos. Igualmente, colaboraron en los trabajos de extinción miembros de la Policía Local y Guardia Civil. Por el momento se desconocen las causas del suceso, que motivó la presencia de muchos curiosos. El humo se apreció desde distintos puntos de La Carolina, especialmente desde la zona norte del casco urbano. La fachada del edificio también quedó muy dañada por este suceso. Por la noche los bomberos refrescaban la zona en la que las llamas alcanzaron su mayor altura, aunque a las diez el fuego se dio por extinguido.